Media hora antes de que empezara el clásico rosarino, un joven de 27 años se descompuso en la platea alta del Coloso del Parque, de espaldas al Museo Provincial, ante el estupor de los familiares que habían venido con él desde Buenos Aires para presenciar el partido. Tras los primeros auxilios brindados por paramédicos de un servicio de emergencias apostado en el estadio, el hincha fue trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Alvarez, donde se le continuaron practicando trabajos de rehabilitación. Pese a esas intensas tareas durante una hora, los médicos no pudieron salvar la vida del joven. Desde el centro médico diagnosticaron que el muchacho sufrió un paro cardiorrespiratorio. No se informó si tenía problemas cardíacos previos. Se llamaba Máximo Colello y residía en Capital Federal.