El intendente Miguel Lifschitz decidió pedirle al Concejo Municipal una prórroga para remitir el Presupuesto 2008, porque el plazo para entregarlo vence mañana. Son apenas diez días pero le permitirán a Lifschitz y a su secretario de Hacienda Gustavo Asegurado, contar con información necesaria como para hacer "pequeños ajustes", confió a este periodista una fuente de la administración local que agregó que "nunca hay demasiadas variantes en un presupuesto municipal porque no se puede bajar el nivel de gastos y tampoco hay posibilidad de incrementar demasiado los recursos". Con todo, una de las preocupaciones del intendente y su equipo -aún anterior al 10 de diciembre cuando se inicie el nuevo mandato-, es la política salarial.

Los municipales pararán mañana por 24 horas, porque el intendente les cerró la puerta a un aumento del 10% antes de fin de año. "Hay que esperar la paritaria del año próximo", dijo Lifschitz como toda declaración pero, obviamente, no alcanzó para destrabar el conflicto.

Ya este año, allá por el mes de abril, el Concejo tuvo que autorizar al Ejecutivo una partida presupuestaria extra de 65 millones de pesos para hacer frente a los aumentos de sueldo para el personal municipal. La administración local sabe que esta vez ese refuerzo presupuestario deberá ser superior, si la inflación sigue acechando a los salarios y las paritarias del sector comienzan a ponerse demasiado duras.

En rigor, es un verdadero problema no sólo para éste sino para todos los municipios que se encuentran en la encerrona de tener que otorgar aumentos salariales sin aumentos considerables de fondos coparticipables y sin la posibilidad de generar nuevos recursos.

El presupuesto municipal de 2007 había autorizado gastos por poco más de 750 millones, a los que se agregaron los 65 millones de refuerzo para afrontar los incrementos salariales. Esos 815 millones alcanzaron justo para culminar un año de gestión y, en realidad, quedaron cortos si se considera que no se puede otorgar un 10% de aumento de sueldo antes de fin de año, sin comprometer partidas ya asignadas a otros rubros.

La información que espera Lifschitz y su equipo para terminar los detalles finos del presupuesto 2008, pasan por el presupuesto provincial que también ha quedado diferido para después del recambio gubernamental si bien ya había sido remitido por el gobernador Jorge Obeid. En ese proyecto de presupuesto ya estaba contemplada la coparticipación nacional y también la provincial. Y en este último rubro, prácticamente no había variaciones, pero en Rosario se espera que eso se modifique y pueda contar la ciudad con más recursos.

Aunque si uno se atiene a la palabras de varios futuros funcionarios provinciales, las cosas no aparecen tan claras. "Hay quienes creen que porque el gobierno provincial y el de Rosario sean ahora del mismo signo político se va a abrir una canilla que genere un grueso chorro de recursos para la ciudad. Pero eso no va a ser así porque hay leyes que cumplir, hay una coparticipación que respetar", se atajaba uno de los futuros miembros del equipo económico de Binner.

De todas maneras, sigue abierta la esperanza en torno al incremento de recursos en un rubro que demanda una gran inversión pública de la municipalidad: El área de Salud, que se lleva el 26% del presupuesto general, esto es unos 195 millones cada año. Si, como se anticipó, se puede lograr una modificación de la Ley Pascutto que determina una importante porción de lo recaudado por la Lotería provincial para solventar hospitales -menos los de Rosario-, se podría allí generar un nuevo recurso para el municipio rosarino lo que -además- sería un caso de extrema justicia porque los nosocomios municipales atienden en gran medida a personas de otras localidades y a menudo de otras provincias.

Pero para contar con todo esta información no alcanzarán los 10 días de la prórroga solicitada por el Ejecutivo. De todas maneras, "se puede funcionar tranquilamente con una prórroga del ejecutado de 2007", dijo la fuente consultada. Con lo cual, recién en las primeras sesiones del período ordinario del Concejo en 2008, se trataría el presupuesto para el año próximo.

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