Un diario, un actor social

Por Hermes Binner*

Cuando alguna institución cumple 18 años nace la tentación de usar el lugar común y hablar de mayoría de edad. Pero no hay acontecimiento temporal que no sea una paradoja. Dieciocho años pueden ser el comienzo de una vida o toda la vida. El tiempo siempre es un valor relativo y la escala la dan los hombres y mujeres con los acontecimientos que producen.

Durante estos 18 años Rosario/12 acompañó y reflejó en sus páginas la extraordinaria transformación que vivió la ciudad de Rosario en ese período, un proceso político sin precedentes en la historia contemporánea de la ciudad.

Y al destacar este aniversario, no podemos pasar por alto que estamos en los albores del Bicentenario y este hecho histórico genera una sensibilidad político cultural, que ya estamos comenzando a transitar, que nos lleva a repensar nuestra sociedad, el lugar en el que estamos parados hoy y los horizontes posibles. En ese camino, pensar hacia adelante es proyectar el futuro que queremos para nuestra ciudad, nuestra provincia y para nuestra Nación.

Entendemos que estamos viviendo un momento clave de la historia para rescatar los valores que sean cimiento de la nueva argentinidad y de la nueva convivencia. Un momento para que la sociedad se interrogue a sí misma, con preguntas por el pasado, por la historia; y preguntas por la actualidad: Por la democracia que tenemos, por la sociedad que conformamos y por el futuro a construir.

La comunidad y la democracia necesitan ser repensadas permanentemente, para alcanzar una sociedad más justa e inclusiva. Estoy convencido de que en este momento histórico, los medios de comunicación social están llamados a jugar un rol fundamental y, no tengo dudas, Rosario/12 estará a la altura de la circunstancias, honrando su trayectoria hilvanada por el trabajo de destacados periodistas de la provincia.

Un diario no es una fábrica de papel impreso. Es un actor social que se involucra, sintetiza demandas, les pone rostros y nombres y le asigna espacios al debate. Y lo hace en un marco de tolerancia pluralista e independencia democrática.

Si Rosario/12, con sus 18 años, hoy se diploma de adulto es porque ha logrado con sus lectores una complicidad basada en la una comunicación abierta, precisa, oportuna y veraz.

Feliz aniversario, entonces, a todos los que con su trabajo cotidiano construyeron este presente, siempre comprometido con la defensa de los derechos humanos y de las instituciones de la democracia.

*Gobernador de la provincia de Santa Fe.

Esa referencia insoslayable

Por Miguel Lifschitz*

En el año 90 cuando nace Rosario/12, en Rosario comenzaba la primera intendencia socialista. Estos 18 años del diario han coincidido entonces con nuestra propia historia en el gobierno de la ciudad. Para una fuerza política como el socialismo, cuyo sustento ha estado siempre en el apoyo del electorado independiente, la existencia de medios de comunicación que reflejaran de manera objetiva la realidad y expresaran una capacidad de observación crítica de los sucesos que ocurren en el ámbito de lo local, ha resultado siempre de una gran importancia.

Pero, es especialmente importante para los ciudadanos, para aquellos que quieren tener más de una mirada a la hora de analizar los escenarios de la política local y escuchar más de una voz sobre las cosas que pasan en la vida de la ciudad y de la provincia.

Así, Rosario/12 se ha convertido en estos años en un testigo privilegiado y siempre bien informado de todo lo que ocurrió en Rosario y en Santa Fe y en una referencia insoslayable cuando se quieren conocer los temas que día tras día agitaron la realidad local.

Los titulares de tapa han reflejado siempre con humor e inteligencia la noticia más destacada, logrando en muchos casos imponer la agenda diaria de los medios.

No creo en el periodismo independiente, pero sí en el periodismo serio, informado y comprometido con su público y con determinados valores éticos. El periodismo tiene una función social y Rosario/12 ha sabido honrar ese precepto. Su compromiso con la defensa de los derechos humanos ha sido una constante en estos 18 años de vida.

La calidad en el trabajo periodístico y la particular manera de mirar la realidad han contribuido a mantener una sociedad con los ojos abiertos y sensibilizada ante cada una de las situaciones que conmocionaron a los rosarinos.

La fidelidad al hecho y la exactitud de la información son piedras angulares de la tarea de los medios con responsabilidad social.

La definición de democracia como gobierno de los ciudadanos o gobierno de opinión requiere de un periodismo objetivo, riguroso, analítico e investigativo, un periodismo en que se confronten las diversas versiones sobre un hecho, se respeten los puntos de vista de las minorías y se saquen a la luz pública los temas de interés general.

La concentración multimediática, la fusión empresarial en el rubro de las comunicaciones y de la información, la acelerada circulación de las noticias, entre otros motivos, han producido profundos cambios también en la función y en el desarrollo de la actividad periodística.

Los medios de comunicación inciden en el pensamiento ciudadano. Pueden reflejar, distorsionar o modificar las actitudes de la gente. Por ello es tan importante la pluralidad de opiniones y la diversidad en las fuentes de información.

Rosario es una ciudad bien informada, inquieta y difícil de conformar. Por eso quizás, es más exigente con sus periodistas y también con sus gobernantes y representantes. Y esto es bueno, porque requiere un esfuerzo permanente de superación.

*Intendente de Rosario.

El espíritu de la trascendencia

Por Agustín Rossi*

"Ni Coti ni Manzano. Somos un medio independiente". Era setiembre de 1990 y el director de Página/12 repetía esa frase en el Patio de la Madera, para el lanzamiento del Rosario/12.

En ese entonces yo era concejal y presidía el bloque justicialista; Feldman, Vargas y Alongi aparecían como jóvenes arriesgados y provocadores de la mano de un medio nacional que había cambiado definitivamente la forma de titular en el periodismo gráfico. Nada mejor para el oficio que un buen título, nada mejor que periodistas con estilo incisivo, que el valor preciso de la imagen y el plus del Negro Fontanarrosa "Desde El Cairo" en las contratapas. Eso era "el suplemento local" del Página y, así, comenzó a hacerse un lugar en la ciudad.

Mientras escuchaba la propuesta del Rosario/12 y miraba las caras de los periodistas -la mayoría recién se acercaba a la profesión-, me preguntaba si sería una presentación más y si los rosarinos aceptarían otro medio gráfico que no fuera La Capital.

Siempre me pregunto y discuto con mis compañeros cuáles son los atributos para la trascendencia, cuáles son esos actos que logran la perdurabilidad en el tiempo y en la memoria.

Quizás perduren solamente los que establecen pactos y miradas cómplices que permiten generar pequeños acuerdos y rupturas cotidianas. Ese ejercicio es el que reconstruye el pacto intimista, casi mágico como es la lectura de un diario. Un hecho absolutamente rutinario, pero cargado de emociones. Lleva al lector al centro de la escena. Lee un título en voz alta e insulta; agrega a la crónica penosas situaciones que padece como vecino; señala la parcialidad periodística a la hora del análisis; se estremece con notas sobre la inequidad social y se transforma en felicidad con la foto de los que llevaron la pelota al centro del arco, el gol que él o ella misma hubieran hecho. Casi mágico.

Dieciocho años pasaron y nuestra ciudad tuvo muchas experiencias en medios gráficos pero ningún diario había perdurado tanto.

El capítulo que me toca escribir, no es ajeno al compromiso de las últimas dos décadas, la misma convicción de aquellos tiempos en los cuales la democracia era mucho más débil y la militancia -al igual que hoy- forjaba construcciones sociales y lazos solidarios que determinaban la dinámica política.

Los jóvenes periodistas que amanecieron al nuevo emprendimiento son, ahora, hombres y mujeres de trayectoria en esa profesión, formadores de opinión y testigos de los cambios ciudadanos.

"Ni Coti ni Manzano. Somos un medio independiente", adquiere ahora otra dimensión, la de la trascendencia.

El logro es de los ciudadanos porque ellos son quienes sostienen con su compromiso de lectura ese estilo periodístico. Vaya mi reconocimiento para cada uno de los trabajadores de prensa de Rosario/12.

Nobleza obliga: La saeta de la tinta traspasó el sentido y la conciencia. Creo reconocer en ese lugar, el espíritu de la trascendencia.

Felicidades.

*Presidente del Bloque de Diputados Nacionales del Frente para la Victoria (FPV).