El gobernador Antonio Bonfatti ha abusado quizás de su buena relación con la oposición legislativa. La remisión del proyecto de Presupuesto 2014 al Senado es una clara muestra de que las "gentilezas" políticas y partidarias tienen un límite. Por más intenciones que tengan los representantes del peronismo en la Cámara alta provincial de levantar sus manos para que el Ejecutivo cuente con su ley fundamental; no pueden hacerlo si el escenario público que se les planteó pasó por el ocultamiento de datos y fundamentalmente los deja como meros auditores de los expedientes que remite el gobierno del Frente Progresista.

En el Senado la oposición cree que el eufemismo de la "readecuación" de alícuotas del Impuesto Inmobiliario Urbano y Rural y los "retoques" a los Ingresos Brutos son, en realidad un troyano escondido bajo el voluminoso expediente del Presupuesto 2014.

La escandalosa autonomía con la que se mueven los senadores peronistas del resto de los legisladores y dirigentes del mismo signo político también tiene un límite. Una cosa es contar ajustadamente cuántos representantes debían ausentarse de una Asamblea Legislativa para que quedaran firmes los pliegos de un conjunto de fiscales y defensores que impulsaba el Ejecutivo y que no hubieran pasado por el tamiz de Diputados; y otra muy distinta es quedar expuestos votando a libro cerrado para conservar determinados privilegios. Más teniendo en cuenta que en el medio ha pasado una elección en la que el peronismo cayó al tercer lugar y que muchos señalan la falta de compromiso y fidelidad de cada compañero en los lugares de Santa Fe en los que les toca desempeñarse. La frase "tirámela más lejos que se nota" podría graficar en términos deportivos lo que realmente hubieran querido algunos peronistas a la hora de acordar.

Esta vez, prácticamente no hubo diferencias entre diputados y senadores del peronismo. "Nos habíamos quedado con la palabra del gobernador", dijo Luis Rubeo para hacer ver que nada sabía sobre retoques impositivos en el presupuesto después de las elecciones. Y "esto es una nueva reforma tributaria encubierta", bramó el presidente de la Comisión de Presupuesto del Senado, el peronista Alcides Calvo.

Más allá del ejemplo de la "cajetilla" de cigarrillos para graficar el verdadero monto de algunos incrementos, como dijo el ministro Angel Sciara; también hay otros ítems en discusión. Los aumentos en la Patente Automotor, y la insistencia en imponer un régimen tributario simplificado. También la disminución de los descuentos por Derecho de Registro e Inspección y, quizás lo que más preocupa a los senadores del PJ que es la solicitud de un endeudamiento de distinta naturaleza de parte del Ejecutivo. Y en ese marco detallan que se piden endeudamientos de 600 millones de pesos para "operaciones de financiamiento de corto plazo con entidades financieras", 400 millones para emitir "Letras del Tesoro, pagarés o medios sucedáneos por un plazo no mayor a 365 días" y 1.500 millones para "proyectos de infraestructura" (obras viales, de saneamiento y acueductos).

A nivel local, la intendenta Monica Fein siguió la misma estrategia que el Ejecutivo Provincial: solicitar una prórroga para después de las elecciones a la hora de presentar el Presupuesto 2014 y postergar la discusión en la que también aparecen "readecuaciones" en la Tasa General de Inmuebles. La diferencia es que en el caso del municipio de Rosario algunos candidatos de la oposición habían salido a advertir que se vendría a algún retoque luego de las elecciones. Con lo cual a Fein y sus principales funcionarios no les quedó otra posibilidad que admitir que se estudiaban readecuaciones pero fundamentalmente relacionadas con el proceso inflacionario y la necesidad de mantener el nivel de los servicios esenciales del municipio.

Aunque recién esta semana se conocerá el texto del proyecto de Presupuesto Municipal, ya han salido al cruce voces críticas de los gastos que previó el Ejecutivo para el año próximo. Para el concejal del Partido Socialista Auténtico, Alberto Cortés es inaceptable plantear cualquier incremento tributario municipal "sin que primero se sincere el presupuesto que en los últimos años ha sido un mero dibujo, para que luego el Ejecutivo maneje las partidas con total discrecionalidad". Es curioso, pero es el mismo argumento que la oposición usa a hora de analizar el presupuesto nacional y, llegado el caso, no votarlo.

En el caso del debate local, los llamados los Fondos de Afectación Específica, (partidas fijadas para garantizar un mínimo de cobertura de determinadas necesidades sociales como Obras Públicas, discapacidad, etc), serán el centro de las discusiones. Sobre todo teniendo en cuenta que muchos ediles opositores sostienen que estos fondos "son permanentemente burlados: Desde el inicio se presupuestan ingresos superiores a los gastos previstos, de modo que se sabe desde el arranque que allí va a sobrar dinero", como denunció el mismo Cortés.

Por fuera de la discusión del presupuesto local, pero sí relacionado con la política rosarina y la relación entre el Ejecutivo y el Concejo Municipal; este fin de semana el influyente secretario de Gobierno de la Municipalidad Fernando Asegurado, desmintió su posible alejamiento del cargo. "Hay muchos a los que les encantan los rumores, pero más allá de que uno siempre depende de lo que decida la intendenta, debo decir que no tengo pensado irme a ningún lado. Estoy pensando en todo lo que tengo que hacer mañana junto a todo el gabinete para seguir gestionando la ciudad", dijo tajante.

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