Los peones de taxis se reunieron ayer en la sede local de la Gobernación con el subsecretario de Seguridad provincial, Gustavo Peters, el jefe de la Unidad Regional II de Policía, Ricardo Ruiz, y el subsecretario de Servicios Públicos de la Municipalidad, Gustavo Leone, para tratar el problema de la inseguridad en las calles y la proliferación de los remises truchos. En la reunión, el jefe policial se comprometió a reforzar los corredores seguros; mientras que el funcionario municipal informó que se clausuraron varias remiserías inhabilitadas y aumentó un 40 por ciento la derivación de remises ilegales al corralón.

Horacio Boix, el titular del sindicato de Peones de Taxis, salió satisfecho de la reunión, afirmando que "fue positiva porque se entendió la necesidad de poner en vigencia la ordenanza que plantea tres alternativas de seguridad para los taxis, que son la luz de pánico, el sistema satelital y el blindex".

Boix manifestó que "nos pusimos de acuerdo y hemos decidido acceder a las tres opciones conjuntas. De esa manera, con la modificación de la ordenanza, se obligará a los titulares a poner las tres opciones. Interpretamos todos que cualquier sistema que se implemente en forma independiente y no tenga comunicación con la policía no va a dar resultado. Por eso nos vamos satisfechos".