De acuerdo al último estudio de costos realizado por el Ente del Transporte, el boleto urbano está atrasado 20 centavos a raíz de los incrementos que tuvo el sistema, en particular las últimas subas salariales. El próximo lunes el directorio del Ente se reunirá para concluir el dictamen que luego será remitido al Ejecutivo. El relevamiento sugiere una tarifa convencional de $1.40 y para el cambio justo $1.50, cifras que deberán ser refrendadas por el Concejo. "De acuerdo a los datos preliminares que han trascendido, hay un desfasaje objetivo que debe ajustarse para evitar un deterioro en el servicio", reconoció a Rosario/12 el futuro secretario de Servicios Públicos, Gustavo Leone. Según pudo saber este diario los aumentos -ya otorgados- en los sueldos de los choferes, del orden del 35 por ciento, impactaron cerca de un 45 por ciento en la estructura del sistema. La idea del socialismo es aprobar el aumento tarifario antes de fin de año.

El lunes pasado se reunieron los directores del Ente. Allí se analizó preliminarmente el último estudio de costos. Se decidió pasar a un cuarto intermedio hasta el próximo lunes. "Todavía no me dieron las conclusiones del trabajo, asi que no tengo elementos objetivos para opinar si se justifica un aumento tarifario porque si bien hubo incremento en los insumos y en los sueldos también se registró una fuerte suba en el número de pasajeros", planteó el concejal justicialista Arturo Gandolla, vicepresidente del Ente.

Según pudo saber este diario, el estudio plantea que la tarifa convencional que hoy es de $1.20 debiera costar $1.40 para que el sistema no sea deficitario. El boleto ocasional con cambio justo hoy ubicado en $1.25 debería estar en el peso con 50 centavos.

Ayer, al trascender los primeros datos, el intendente Miguel Lifschitz fue consultado al respecto. "La verdad es que todavía no hemos recibido oficialmente ningún estudio", aclaró el jefe comunal tras lo cual reiteró que una vez que cuente con datos objetivos "analizaremos la situación y eventualmente mandaremos un mensaje al Concejo".

Consultado por Rosario/12, Leone reconoció haber escuchado "extraoficialmente y de manera preliminar los estudios del Ente donde

se menciona el nivel de desfasaje existente comparando noviembre de 2006 con octubre de 2007. Está claro que hay un desfasaje objetivo entre ingresos y costos que debe ajustarse para evitar un deterioro en el servicio que lo venimos mejorando de manera sostenida, fundamentalmente a través de la renovación de las unidades".

El funcionario fue más allá y admitió que de ratificarse en el dictamen final del Ente los trascendidos ayer conocidos, "sería aconsejable que la tarifa se ajuste antes de fin de año para evitar atrasos".

En ese sentido, en el socialismo son optimistas. A partir del 10 de diciembre, cuando se renueve la mitad del cuerpo, el oficialismo pasará a controlar con mayor comodidad las votaciones en el Concejo a raíz de los siete ediles que consiguió en las últimas elecciones. "Seguramente saldrá el aumento en una de las dos sesiones de prórroga antes de fin de año", confió a este medio un operador oficialista.

De ser así, sería el segundo incremento del boleto del transporte en menos de doce meses. El último aumento lo fijó el propio intendente a fines de enero del año en curso en uso de las facultades transferidas por el Concejo, que se encontraba en receso.

Un dirigente justicialista no descartó que "finalmente Lifschitz lleve la tarifa no a $1,40 sino a $1,30 para mostrar que pese a los resultados de los estudios de costos del Ente no quieren afectar a los pasajeros más vulnerables". Igualmente, desde el PS aclararon que el aumento que se aprobará es a cuenta de las subas ya registradas. La UTA adelantó que reclamará entre 20 y 25 por ciento de suba salarial en el 2008.