Con promesas de mejorar "la calidad y eficiencia del sistema", el intendente Miguel Lifschitz anunció ayer el llamado a licitación para que el transporte de la ciudad cuente con rastreo satelital y una tarjeta inteligente. Desde el lunes los interesados podrán adquirir los pliegos de cara a los procesos en los cuales el municipio invertirá cerca de ocho millones de pesos. La mayor novedad, que se implementará dentro de un año, permitirá al pasajero tener una tarjeta similar a la de crédito, personalizada, recargable y utilizable para la cancelación de otros servicios como el estacionamiento medido y el viaje en taxis. Al contar los colectivos con GPS, el Ejecutivo tendrá información precisa sobre las frecuencias de cada una de las unidades y al mismo tiempo, los usuarios podrán recibir en sus celulares mensajes de texto con datos on line sobre la ubicación del ómnibus al que pretenden subirse. Los dispositivos a incorporar posibilitarán además la realización de trasbordos pagando un adicional.

Lifschitz encabezó ayer a la tarde la presentación del paquete tecnológico para el transporte en un acto realizado en el Palacio Municipal. Estuvieron junto al intendente el secretario de Servicios Públicos, Gustavo Leone, el presidente del Ente del Transporte de Rosario, Sebastián Bonet, y la gerente del ETR, Mónica Alvarado.

El intendente se mostró muy satisfecho de poner en marcha una nueva etapa en el proceso de innovación tecnológica aplicada al transporte, y en ese sentido precisó que "el nuevo sistema mejorará la calidad y la eficiencia del servicio como órgano de fiscalización".

Leone explicó que "la iniciativa forma parte de un proyecto relacionado con una visión a mediano y largo plazo para optimizar el servicio en Rosario", recordando que el transporte es un servicio esencial y básico para el desarrollo de las distintas áreas de la ciudad.

En diálogo con Rosario/12, el secretario de Servicios Públicos confirmó que a partir del próximo lunes los interesados podrán adquirir los pliegos en la dependencia a su cargo. A mediados de agosto se iniciará la etapa de evaluación de ofertas y en septiembre se adjudicarán los procesos. Para la licitación del GPS la municipalidad destinará un millón de pesos y para la tarjeta inteligente cerca de siete millones.

Una vez adjudicadas las concesiones, los adjudicatarios tendrán otros 120 días para diseñar la logística necesaria. En el municipio creen que en abril de 2009 las novedades comenzarán a aplicarse.

"La tarjeta inteligente se irá implementando por etapas porque supone un cambio muy fuerte de la tecnología que se está utilizando y de los hábitos actuales de los usuarios", aclaró Leone. El funcionario explicó que la "supertarjeta" no tendrá una banda magnética como la actual, sino que tendrá un chip y será de plástico como las de crédito. "Será una tarjeta personalizada, con el nombre del usuario, recargable por internet y también en las sucursales del Banco Municipal, en kioscos y en los puntos de comercialización actuales", precisó.

Inicialmente la tarjeta inteligente y la actual "convivirán pero la idea es que la nueva la suplante". Es más, en una segunda etapa, la supertarjeta permitirá cancelar otros servicios públicos concesionados como el estacionamiento medido y los viajes en taxis. "Para esa instancia falta un poco pero la idea es poder hacerlo", acotó.

Con la tarjeta inteligente en funcionamiento, el gobierno municipal tendrá información precisa para fiscalizar a las empresas y a la vez instrumentar otro cambio: los trasbordos entre distintas líneas en un determinado lapso de tiempo pagando un adicional.

La incorporación del GPS también traerá aparejado otras modificaciones al transporte rosarino. En el 2009, los usuarios podrán recibir en sus celulares información on line a través de mensajes de texto sobre la ubicación del colectivo que pretenden abordar. Los mismos datos estarían disponibles en los refugios a través de una pantalla, aunque el Ejecutivo evalúa el dispositivo a adquirir para evitar escenas de vandalismo, como las que hoy afectan a las paradas.