Un grupo de músicos y compositores rosarinos denunció ayer que en el marco del recorte presupuestario, la Secretaría de Cultura suspendió los conciertos de música clásica programados desde junio hasta fin de año en las salas de la Biblioteca Argentina, Museo Castagnino, Museo Estévez, Parque de España como así también los derivados a las salas del Centre Catalá y Amigos del Arte. "Son en total 65 presentaciones con 200 profesionales involucrados", precisó a este diario Patricia Rabiosi, una de las compositoras afectadas para después opinar que la decisión del municipio es "poco seria y arbitraria. Los músicos tenían reservadas las fechas y habían invertido tiempo de trabajo para cada uno de los conciertos". Mañana a las 12 realizarán un concierto en Córdoba y San Martín para contra la medida. Además solicitarán una entrevista con el intendente Miguel Lifschitz y el secretario Fernando Farina.

Según publicó el portal EntreNotas.com.ar, "estos ciclos que organiza Cultura municipal, y por los que también abona el cachet a los intérpretes, comenzaron a funcionar hace 10 años y convirtieron a la ciudad en un lugar indiscutible de desarrollo cultural musical como así lo han señalado artistas y periodistas, con indiscutible respuesta de numeroso público habituado a toda esta programación".

De acuerdo a lo señalado por la editora del sitio, María Josefina Bertossi "los conciertos que organizó Cultura en estos años han tenido grandes aciertos artísticos como el ciclo Integral de las Sonatas para piano de Beethoven desarrollado en 11 conciertos con la participación de alrededor de 20 pianistas locales en la sala de la Biblioteca Argentina con un promedio de más de 200 personas por recital".

"En estos 10 años de programación musical -continuó- la gestión municipal supo interpretar y hacer crecer ese rasgo musical distintivo de Rosario, es de esperar que esta situación solo sea una suspensión momentánea y que vuelva la programación a la brevedad".

Rabiosi confió a este diario que aún o recibieron una explicación oficial para justificar la suspensión de las actividades. "Pero ya sabemos que es en el marco del recorte presupuestario que se viene haciendo. Como músicos y ciudadanos comunes queremos saber qué paso con el dinero que estaba asignado porque la decisión nos parece arbitraria". En ese sentido, Susana Dezorzi, a cargo de la Dirección General de Entidades y Organismos de la Secretaría de Cultura explicó al portal que "para no tener problemas administrativos o problemas operativos en el corto plazo planteamos un impasse en los conciertos hasta tanto poder reorganizar nuestro recurso humano porque siempre estamos hablando de actividades fuera del horario municipal, conciertos a las siete de la tarde para lo cual tenemos que rehacer un ingeniería de personal para poder recibir al público; tal vez vamos a pasar a cobrar una entrada porque también tenemos que ser conscientes que en el mismo marco en el que hemos suspendido muchas de nuestras actividades se nos hace complicado poder sostener estos conciertos. Es posible que cuando los reorganicemos lo hagamos a partir de cobrar una entrada muy módica y de una reorganización del recurso humano para recibir al público y atender al artista".