Dos meses después de haber ingresado el proyecto al Concejo, el socialismo aspira a avanzar la semana próxima con el pliego para licitar el sistema de recolección de residuos que tendrá la ciudad durante los próximos seis años. "Cada concejal tuvo un tiempo suficiente para analizar el proyecto, la idea es empezar a debatirlo en concreto", anticipó a este diario el presidente de la Comisión de Servicios Públicos, el edil oficialista Miguel Pedrana. Desde la oposición los principales cuestionamientos están vinculados no tanto a las bases y condiciones para los próximos seis años sino más bien a los incumplimientos de las actuales concesionarias y el ejercicio del poder de policía del municipio para evitar que las falencias se repitan como la proliferación de minibasurales, la falta de contenedores en los barrios y la no separación en origen de la basura. Los ediles opositores pretenden que algún funcionario del Ejecutivo concurra al Palacio Vasallo para dar precisiones antes de avalar el borrador.

Esta semana los concejales sólo analizarán iniciativas vinculadas al Noroeste de la ciudad ya que el jueves el cuerpo sesionará en ese Centro de Distrito. "Para el otro lunes aspiramos a poder empezar a debatir el pliego que envió el Ejecutivo, ya que cada concejal tuvo dos meses para analizarlo y eventualmente sugerir cambios", adelantó Pedrana.

El oficialismo cuenta con mayoría propia en la Comisión de Servicios Públicos, pero pretende conseguir el mayor consenso posible antes de llevar el expediente al recinto. De siete integrantes que tiene la Comisión, cuatro son del PS: además de Pedrana participa el presidente de la bancada socialista, Manuel Sciutto, Pablo Colono y Viviana Foresi. Los otros tres integrantes son Carlos Comi (ARI), Fernando Rosúa (Encuentro Por Rosario) y el justicialista Osvaldo Miatello.

"Sobre el pliego en sí no tenemos mayores objeciones, porque incluso el contrato vigente no está mal planteado pero en la práctica el sistema no ha funcionado bien", opinó Miatello, tras lo cual comentó que la bancada que integra solicitó en dos oportunidades la presencia de funcionarios del área ambiental de Servicios Públicos en el Concejo para que respondan algunas de las inquietudes del PJ.

"Queremos escuchar la postura del Ejecutivo para saber si la mala prestación del servicio de las concesionarias (Cliba y Lime) se debe a una falla en el ejercicio de poder de policía del municipio o a otras razones porque la realidad es que han aumentado los minibasurales, no han funcionado del todo los denominados puntos verdes y los contenedores no están presentes en todos los barrios", agregó.

Fernando Rosúa le anunció al propio Pedrana que no hará público su posicionamiento sobre el mensaje de la intendencia hasta tanto sean contestados dos pedidos de informes suyos, vinculados a la actual prestación del servicio y eventuales sanciones aplicadas.

Comi confió a este medio que "en líneas generales" estaba de acuerdo con el contenido del proyecto del municipio aunque "sería bueno incorporar acciones concretas que eviten la formación de nuevos basurales y un marco jurídico para que se apruebe el proyecto basura cero de cara a los próximos veinte años".

El oficialismo buscará aprobar el pliego en julio para poder aplicar los cambios en los primeros meses de 2008. De ser avalada la iniciativa tal cual fue remitida, la principal novedad será que Rosario será dividida en cuatro zonas, en lugar de las dos actuales y el marco regulatorio contemplará la posibilidad de adjudicar parcialmente los servicios y las áreas. De esta forma, el municipio se reservará el derecho de hacerse cargo de alguna zona o tarea si los costos propuestos por los oferentes resultan onerosos.

El monto que deberá desembolsar el municipio mensualmente variará de acuerdo al encuadre gremial de los trabajadores: si se mantienen bajo el convenio actual de los recolectores implicará una erogación de siete millones y medio de pesos; si finalmente son representados por Camioneros será de 15 millones.