La detención de Mario Roberto Segovia en Rosario y la mención de la ciudad como parte de la ruta de la efedrina generaron ayer un fuerte contrapunto entre la jueza federal Laura Inés Cosidoy y el Ministerio de Seguridad provincial. Para la magistrada "la cuestión de este personaje puntual puede sorprender, pero no puede sorprender dentro de lo que pasa en la región, por las facilidades que hay para este tipo de actividad". La camarista fue más allá al calificar de "autista y soberbio" al gobierno de Hermes Binner en lo referido a la lucha contra el narcotráfico, ya que, según denunció: "Estamos viviendo una situación muy grave que no quieren advertir. Hay serias denuncias hechas por connivencia contra autoridades y jefes policiales que nunca prosperaron ni tuvieron la atención de quienes la tienen que tener". El secretario de Seguridad, Carlos Iparraguirre refutó las afirmaciones de Cosidoy al informar que "este año hubo más secuestros de estupefacientes que en los últimos cuatro juntos". Además comentó que se están realizando gestiones ante la Nación para "celebrar un convenio que permita cooperar en el control y registro de precursores químicos que se realicen en Santa Fe".

Conocida la detención de Segovia, el rosarino sindicado como el mayor proveedor de efedrina de los carteles mexicanos desde la Argentina, la jueza Federal e integrante del Tribunal Oral Federal Penal número 1 de Rosario, Laura Inés Cosidoy retomó ayer sus históricos cuestionamientos hacia el poder político provincial. "Puntualmente la cuestión de este personaje puede sorprender pero creo que no puede sorprender dentro de lo que pasa en la región, no únicamente en Rosario, por las facilidades que hay para este tipo de actividad", sostuvo a LT8.

La magistrada recordó que "Rosario no estuvo del todo ausente en el tema de la efedrina, hubo un supuesto laboratorio de calle Entre Ríos en pleno centro. Recién con el triple crimen se supo y hasta ese momento no se había investigado para qué era, para que se usó, donde estaba, pero a partir de ese momento hubo varios procedimientos en la ciudad porque se sabía a partir de las investigación que venía de Buenos Aires que algo podía haber acá en Rosario, cosa que, por lo visto, no conmovió a las autoridades de la provincia y de la ciudad, porque se dejó que fuera la autoridad que estaba interviniendo y nada más la que investigara".

Luego Cosidoy reiteró sus sospechas en torno a la presunta connnivencia entre autoridades, fuerzas de seguridad y narcos. "Hay un solo grupo en Rosario del que yo pueda decir está trabajando sin cobrar por la impunidad y lo están presionando bastante a ese grupo también, es el grupo que estaba a cargo del comisario Franganillo, todo lo demás sigue tal cual lo he denunciado hace años".

Al ser consultada sobre la labor del gobierno santafesino, la jueza aseveró: "Realmente creo que el término es autismo y en determinados momentos soberbia, en un tema que es muy grave para tener este tipo de equivocación. He notado cambios para atrás, he notado autismo, he notado que no se advierte, que no se oye lo que está pasando alrededor, que no se habla, que simplemente se dice que está todo bien".

Cosidoy aclaró que no tuvo oportunidad "de tener un contacto personal con autoridad del gobierno, una vez a través de los medios cuando denuncié connivencia policial en Villa Constitución el ministro (de Seguridad de la provincia, Daniel) Cuenca dijo que cuando yo denunciara cosas serias me iban a escuchar".

Iparraguirre fue el encargado de responder las acusaciones de la jueza. Aclaró que no quería entrar en polémicas personales y remarcó que el Ministerio estaba abierto para escuchar a todos. Luego destacó el funcionamiento de la Dirección de Prevención y Control de Adicciones provincial: "Siempre ha sido una de las áreas más afectadas de la policía y sin embargo en lo que va de este año de gestión se han superado todas las estadísticas no sólo en cuanto a secuestro de estupefacientes, sino en la cantidad de investigaciones que terminaron en alrededor de 280 allanamientos que implican toda una tarea previa a través de la Justicia federal que en el caso particular de Rosario ha terminado con quienes aparecían apuntados, incluso por la propia doctora Cosidoy, como los principales narcotraficantes de la zona sur, que parecían intocables hasta hace poco tiempo atrás". En ese sentido el funcionario informó que "este año hubo más secuestros de estupefacientes que en los últimos cuatro años juntos".

Iparraguirre comentó además que la provincia "está interesada en celebrar un convenio que permita cooperar en el control de precursores químicos", en especial de la efedrina, por lo cual desde el Ministerio de Seguridad se inició la gestión y "ya hay borrador de convenio para no depender solamente de las autoridades nacionales".