CIUDAD › FAGGIONATO MARQUEZ TOMARá DECLARACIóN A LOS DETENIDOS
Hoy serán indagados Mario Roberto Segovia, considerado el mayor exportador de efedrina hacia México, así como su esposa, su primo, su contador y otro hombre que trabajaba para él. Ayer hubo más allanamientos en busca de pruebas.
› Por José Maggi
El juez federal de Campana, Federico Faggionato Márquez, le tomará hoy declaración indagatoria a los últimos cinco detenidos por el caso de la "ruta de la efedrina": Mario Segovia, su primo Sebastián, su esposa Gisela Itatí Ortega, su contador Roberto Guerini y un hombre que trabajaba para él, identificado como Daniel Bocchi. En tanto, ayer fue allanado un conocido estudio jurídico contable del centro rosarino, de donde los pesquisas se llevaron abundante documentación. Por otra parte, los investigadores tienen en la mira la operatoria de Segovia en la Aduana del puerto local. (Ver aparte).
Segovia y su primo fueron detenidos el domingo a la tarde en el aeroparque Jorge Newbery cuando iban a abordar un avión a Misiones, y en el procedimiento se les secuestró un auto Volkswagen Pasat, dos teléfonos, dos notebook, 3.000 dólares y 2.000 pesos.
En el momento de la detención, Mario Segovia tenía en su poder un documento bajo la identidad de Héctor Germán Benítez, quien en realidad es un hombre que se encuentra detenido en la cárcel de Sierra Chica acusado de un robo calificado.
La sospecha de los investigadores policiales es que Segovia tenía planeado viajar a Misiones, desde donde pensaba abandonar el país de manera ilegal. Según los investigadores, Segovia había comprado entre 2006 y el 2008 más de 8.100 kilos de efedrina, cuyo precio en el mercado ilegal mexicano es de unos 30 millones de dólares, por lo que el ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, Aníbal Fernández, lo sindicó como el "mayor proveedor de los carteles mexicanos".
De hecho, el juez Faggionato Márquez cree que Segovia para quien había ordenado la captura hace meses pero bajo el nombre falso de Benítez le compraba efedrina a Raúl Ribet, uno de los primeros imputados presos en la causa.
Segovia, de unos 40 años, se instaló hace dos años junto a su mujer y sus dos pequeños hijos en la mansión ubicada en la calle Alvarez Condarco, que fue allanada por la Justicia. Se hizo conocer ante los vecinos como un exportador de bananas y no disimuló su pasión por los autos.
El primero de los allanamientos se realizó en su casa ubicada en Alvarez Condarco 472 bis y bulevar Argentino, en la zona más exclusiva del barrio Fisherton, de la ciudad de Rosario, donde los investigadores policiales detuvieron a la esposa de Segovia. Además, en esa casa, se encontraron precursores químicos como etanozol, cianuro, yodo y acetona, bajo la inscripción de la droguería Famérica, de la Capital Federal, que ya había sido allanada por el mismo caso en septiembre pasado, cuando se demoró a su dueño, luego liberado.
También encontraron un arsenal, que consta de tres pistolas calibre 9 milímetros (dos Glock y una Pietro Beretta), otra Glock calibre 10 milímetros, cuatro escopetas calibre 12/70, tipo Itaka, marcas Remington, SPS, Maverick y Franchi, un revólver Mágnum calibre 22 y una carabina Ruger 22.
Luego, se realizó otro allanamiento en un estudio contable ubicado en Rivera Indarte 3755 de Rosario, donde fue detenido el contador Guerini. Allí, se secuestraron 50 mil dólares, más de 12.000 pesos y 3.000 euros, como así también varias computadoras y equipos de teléfonos.
Según se supo ayer, cuando Segovia llegó a Rosario, instaló en un departamento ubicado en un edificio en Pasaje Zabala y Sarmiento, frente al policlínico PAMI I. Llamaba la atención entre sus inquilinos por su camioneta Hummer.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux