Los choferes del transporte urbano de pasajeros exigieron a los empresarios del sistema y al municipio como poder concedente que efectivicen a partir del 1º de marzo el aumento salarial del 36 por ciento que ya acordó la UTA para los conductores de larga distancia. Los colectiveros advirtieron a la cámara que nuclea a los propietarios de las unidades y a la Secretaría de Servicios Públicos que de no recibir los 600 pesos promedio de incremento en sus haberes, realizarán medidas de fuerza. A nivel nacional el lunes se reunirán las partes en el Ministerio de Trabajo, instancia en la que el Gobierno podría anunciar la ampliación de los subsidios pero sólo para Capital Federal y Gran Buenos Aires. "Si esto se confirma el panorama será muy negro. Nosotros no tenemos recursos para pagar el aumento de sueldos y no quedará otra opción que el incremento tarifario", advirtió Rubén Rodríguez, titular de la firma Las Delicias que controla nueve líneas del transporte rosarino.

El martes pasado, en la cartera laboral se reunieron representantes de la Unión Tranviarios Automor, la Fatap -cámara nacional de empresarios del trtansporte- y funcionarios del Ministerio de Trabajo. Allí los delegados gremiales reclamaron un aumento salarial del 36 por ciento a partir de marzo, sueldo que cobrarán los choferes en los primeros días de abril.

"La UTA está reclamando para los choferes urbanos y de media distancia el mismo aumento que se le otorgó a los conductores de larga distancia, acordado antes del inicio del verano cuando los empresarios del sector se vieron presionados por el inicio de la temporada turística que venía de la mano de un aumento importante de la demanda", explicó Rodríguez.

Ante la falta de consenso, la reunión del martes pasó a cuarto intermedio hasta el lunes a las 11. Los choferes ya le hicieron saber a los empresarios que si ese día no hay acuerdo, anunciarán el inicio de un plan de lucha, cuya modalidad la definirán cada una de las seccionales.

Especialmente interesado en contener el rebrote inflacionario que implicaría un aumento tarifario para financiar el incremento salarial, el Ministerio de Planificación Federal tiene en estudio ampliar los subsidios que entrega mensualmente a los empresarios del sistema.

Según trascendió ese aporte estatal extra sería sólo para Capital Federal y Gran Buenos Aires. Ante este sombrío panorama, en Rosario, la UTA tiene previsto reunir a su comisión directiva el mismo lunes para analizar posibles medidas de fuerza a adoptar en el corto plazo.

"Si esta versión se confirma la situación será muy grave. En la actualidad ya estamos trabajando con poco margen, imagínate lo que puede llegar a pasar si tenemos que pagar de nuestro bolsillo un aumento a los choferes de 600 pesos promedios. Es imposible", advirtió Rodríguez.

El titular de la firma Las Delicias, que maneja nueve líneas del TUP rosarino y se presentó en la licitación para el nuevo sistema, conjeturó que la única alternativa para poder afrontar el inminente aumento slarial sería "retocar la tarifa y llevarla como lo venimos pidiendo a por lo menos 95 centavos", 20 centavos más que en la actualidad.

Días atrás, la Cámara de Empresarios del Transporte Urbano de Pasajeros (Cetup) le había enviado a la secretaria de Servicios Públicos, Clara García, una nota a través de la cual solicitó una modificación del cuadro tarifario para poder absorber la suba de los insumos.

En aquella oportunidad, la funcionaria municipal supeditó una definición del Departamento Ejecutivo a la definición de dos variables: la paritaria entre empresarios del transporte y choferes y la continuidad de los subsidios que entrega el gobierno nacional para adquirir el gasoil a precio diferencial (los propietarios de los micros sólo abonan 45 centavos por litro, mientras que el resto lo entrega el Estado), novedades que aún no han aparecido, al menos formalmente.