El propietario de un supermercado, de nacionalidad china, fue atacado a balazos por la espalda. La sospecha de los investigadores es que se trató de un ataque de tipo mafioso y descartaron que los delincuentes hayan querido concretar un robo. El hecho ocurrió minutos después de las 8.30 de ayer en un supermercado ubicado en Rouillón 3395, casi esquina Uruguay, donde desconocidos irrumpieron con armas cortas y dispararon por la espalda a uno de sus propietarios. Tras consumar el ataque los delincuentes huyeron "aparentemente sin robar nada", según fuentes policiales. El hecho estaría relacionado con la denuncia que hiciera hace pocos días un comerciante chino afincado en San Luis al 2300 donde develaba prácticas mafiosas por parte de personas de su misma nacionalidad. Lin Beini reveló que un grupo de connacionales le exigió dinero a cambio de dejarlo trabajar.

Los investigadores sospechan que, por las características del hecho, el de ayer se trató de un ataque del tipo mafioso, lo cual tiene varios antecedentes durante el último año. El comerciante herido fue trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Alvarez, donde continúa internado en estado reservado.

El pasado 19 de febrero, otro ciudadano chino presentó una denuncia policial en la comisaría 2ª, en la cual acusó a connacionales suyos de exigirle 20 mil pesos al año para permitirle "trabajar tranquilo".

Desde entonces, la policía local continúa investigando si ese episodio tiene relación con alguno de los ataques a orientales que se produjeron en Rosario durante la segunda mitad del año pasado. Lo cierto es que tras la denuncia de Lin Beini -que acusó a mafiosos de su nacionalidad de exigirle 20 mil pesos al año para permitirle trabajar tranquilo- los investigadores evalúan si tiene relación con alguno de los ataques a orientales que se produjeron en Rosario en la segunda mitad del año pasado.

El apriete denunciado el sábado 19 de febrero por Lin Beini en la seccional 2ª tuvo al menos tres episodios violentos anteriores de características similares: el crimen de un cobrador chino, el secuestro de un comerciante y la brutal golpiza a un supermercadista. Por eso ante la denuncia presentada por Lin Beini, desde el juzgado Correccional Nº 7 giraron el caso a un tribunal que interviene en delitos de mayor gravedad. El parte policial llegó, así, a manos del juez de Instrucción Nº 4, Jorge Eldo Juárez, quien de inmediato lo remitió a la Brigada de Homicidios ya que en esa repartición policial se investigaron el año pasado los hechos más violentos en los que se intuía el accionar de una organización de tipo mafiosa.

En su denuncia, Beini planteó que la "mafia china" lo persigue, le exige 20 mil pesos anuales a cambio de su tranquilidad y lo amenaza por teléfono con matarlo a él o a su familia. Luego el denunciante viajó a Buenos Aires, por lo que los agentes esperaban su regreso para ampliarle la declaración.