En un suceso que podría tratarse de un ritual religioso, Jésica Duré Simón, de 22 años, fue asesinada por su pareja, Darío Estipovich, de 46, con un arma blanca. Sucedió en Pueblo Esther, donde alrededor de las 4.30 de la madrugada de ayer, el hombre degolló además a varias mascotas, entre ellos gatos, perros y aves. Los vecinos de la zona aseguraron que el agresor prendió velas blancas y quemó vestimentas de color negro, por lo que relacionaron el caso con un posible rito macabro. Tras asesinar a su joven pareja, el hombre caminó hasta la casa de su ex esposa, a pocos metros de su domicilio, y la amenazó con un arma blanca. La mujer logró hacer la denuncia y el asesino fue detenido. La fiscal del caso, Nora Marull, confirmó que en el domicilio "se encontraron velas, estampas, bichos muertos y cosas raras que se están investigando para determinar si había algún tipo de alteración en el imputado y verificar el estado de salud mental". Aunque dijo que la del ritual "no es la única hipótesis" que maneja la Justicia rosarina.

El hecho ocurrió a las 4.30 de la mañana. Resultaron víctimas una joven mujer de 22 años y una importante cantidad de animales, dentro de una finca en esa localidad del Gran Rosario. Luego de realizar una seguidilla de pasos que podrían estar vinculados a prácticas religiosas, Estipovich mató a su pareja de una herida de arma blanca en la yugular, tras quemar toda clase de ropa negra. La joven fue hallada en la habitación, tendida sobre la cama.

Además, en la cocina de la vivienda se encontraron gatos, perros y aves también asesinadas. Ante ese escenario, los vecinos relacionaron el hecho con el accionar de una secta. La fiscal Marull dijo en diálogo con LT8 que el hombre "decía que veía el diablo como un mensaje satánico. Pero hay que comprobar si está apoyado en una patología propia de la locura o si se trata de un atajo", para lograr la inimputabilidad penal, de cara a la determinación de responsabilidades.

No contento con asesinar a su pareja, el agresor intentó hacer lo mismo con su ex mujer, utilizando una arma blanca. Fue directo a la casa de Nancy Larraga, de 46 años, que vive a una cuadra de su domicilio -en Stesenson, entre Juan Manuel de Rosas y Lavalle-, muñido de una cuchilla. Sin embargo, ante la denuncia de la mujer al verlo llegar en esas condiciones, resultó rápidamente detenido por personal policial de la subcomisaría 15º.

Los vecinos de Pueblo Esther señalaron que el hombre había encendido velas blancas y quemado ropa negra, por lo que se sospecha que le rinde culto a una secta religiosa. El caso está siendo investigado por la Brigada de Homicidios de la Unidad Regional II.