Decenas de bicicletas estacionadas ocuparon ayer la bicisenda de calle Salta, entre San Nicolás y bulevar Oroño, para reclamar que se destrabe el conflicto que no permite su puesta en marcha. La polémica enfrenta a ciclistas y comerciantes de la zona, mientras se realiza un estudio técnico en el lugar, y los automovilistas que estacionan sobre la vía exclusiva no son multados. La original propuesta de los ciclistas obtuvo el apoyo de varios automovilistas que pasaban por allí.

La intervención urbana consistió en la colocación de carteles, bicicletas acostadas sobre la bicisenda y personas disfrazadas. En esas cuadras, se intentó poner freno al estacionamiento en el lado izquierdo de la calle, donde los ciclistas tienen permitido circular. "Es una protesta pacífica, una intervención urbana para que no duerman el proyecto de la ciclovía que fue votado por Presupuesto Participativo", dijo uno de los manifestantes. "Hace 5 meses que esperamos que se termine la obra y sigue sin habilitarse", se quejó.

Además de los carteles que advertían "prohibido estacionar", "estacionamiento a 45 grados y ciclovía, un sólo corazón", en las esquinas, los jóvenes mostraban carteles que pedían "tocá bocina si estás a favor de la bicisenda".