La Justicia rosarina condenó a 18 años de prisión al subcomisario Alejandro Scalcione, quien mató a su ex pareja, el profesor de historia Nelson Rosso, en abril de 2009. El imputado de 45 años fue hallado "autor penalmente responsable del delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego". Luego de cuatro jornadas de juicio oral y público en las que se ventilaron circunstancias de la relación amorosa entre los dos hombres, el juez de Sentencia Nº 1, Ismael Manfrín, leyó ayer la parte dispositiva de la sentencia; mientras que el viernes estarán disponibles los fundamentos de la pena. Por su parte, los abogados de la querella --instalada por los hijos de Rosso--, Raúl Superti y Ricardo Giusepponi, se manifestaron "disconformes" con el fallo, ya que --al igual que la Fiscalía-- reclamaban la condena a prisión perpetua, debido a que para ellos hubo alevosía en el crimen que cometió Scalcione. Por ello, adelantaron que apelarán la resolución ante la Cámara Penal. Al mismo tiempo, la defensa del condenado presentará apelación porque consideró "excesiva" la sentencia.

Scalcione confesó el homicidio minutos después de pegarle dos tiros a Rosso --uno en el tórax y el otro en el cráneo--, pasadas las tres de la madrugada del 18 de abril de 2009. Esa noche, según el relato del condenado, Rosso "estaba con otro hombre" cuando él llegó a la casa de éste, en Oliveros, después de cumplir un servicio en el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez de Rosario, donde era jefe de destacamento. "El me mató primero", había dicho el policía en aquel momento.

Durante el juicio, la defensa intentó demostrar que se trató de un crimen "por emoción violenta". En cambio, la Fiscalía y la querella, reclamaron condena por "homicidio calificado con alevosía y agravado por el uso de arma de fuego", porque aseguraron que Rosso permanecía "indefenso", cuando recibió los dos tiros, ya que consideraron que estaba dormido. Sin embargo, el tribunal lo condenó con el único agravante del uso de arma de fuego.

"La pena nos parece excesiva, pero consideramos importante que se haya modificado la primera imputación que imponía la prisión perpetua", dijeron los abogados Luis Tomasevich y Eduardo Campeciano al salir de la sala de audiencias de los Tribunales Provinciales. Al mismo tiempo, indicaron que apelarán el fallo: "Es una pena excesiva, porque sin antecedentes penales no se puede agravar la pena por otra circunstancia".

En la última audiencia, el subcomisario pidió perdón, se manifestó arrepentido y aseguró que en la relación con Rosso "buscaba amor". Antes de ser condenado, señaló que como Rosso, él también está muerto.