Un hombre que en 2008 fue atropellado por un auto, mientras transitaba en bicicleta por Entre Ríos y Presidente Quintana, sufrió una reducción de la indemnización por no llevar el casco puesto. Ramón E., de 68 años sufrió heridas que le dejaron una incapacidad de casi el 80 por ciento, principalmente en el cráneo. Justamente, por no usar el elemento de protección, la Justicia rosarina le redujo la indemnización de casi medio millón de pesos, en un 30 por ciento. Con esa resolución, el Tribunal Extracontractual Colegiado Nº 6 apunta a la obligatoriedad del uso del casco por parte de los ciclistas.

El hecho data del 5 de agosto de 2008, cuando el hombre circulaba por calle Entre Ríos y al cruzar Presidente Quintana fue atropellado por el conductor de un Renault 12. El automovilista no respetó la prioridad de paso del que circulaba por la derecha, y tampoco el cartel de "Pare", dispuesto en la vereda y con buena visibilidad. El ciclista, de 68 años padeció heridas que le provocaron una incapacidad de casi el 80 por ciento.

En la resolución el Tribunal que presiden los jueces Horacio Allende Rubino, Juan Carlos Marchese y Néstor García, señalaque "el uso del casco hubiera disminuido el daño sufrido por el ciclista". Además, señalan que los estudios indican que los cascos son "eficaces en las colisiones con vehículos automotores y disminuyen en dos tercios el riesgo de lesiones en el rostro".

En ese sentido, los magistrados puntualizan que es obligatorio el uso del casco por parte de los ciclistas. Ante esa negligencia, los jueces condenaron al automovilista que atropelló al ciclista a pagarle casi 300 mil pesos, en concepto de capital, cifra que con intereses supera el medio millón de pesos.