Unos 1500 docentes rosarinos realizaron ayer una importante movilización, reclamando por la situación de los maestros reemplazantes -muchos de ellos quedarán sin trabajo a partir del 1º de junio-, aumento salarial -piden cobrar un salario de 1800 pesos-; el blanqueo de las sumas remunerativas, y mejores condiciones de infraestructura en las escuelas. Por la marcha, que partió desde plaza 25 de Mayo y concluyó con un acto frente a la delegación local de la Gobernación, los alumnos quedaron desobligados de 10 a 14. Esta situación generó el repudio de la ministra de Educación, Adriana Cantero, quien afirmó que "no existen motivos para dejar a los chicos sin clases". En tanto, el secretario de Amsafé Rosario, Gustavo Terés, dijo que el sector tiene "muchísimos problemas concretos y por eso le hacemos un llamado a la ministra, para que puedan dar la respuesta que la docencia necesita. No nos negamos al diálogo, pero creemos que a problemas concretos, deben existir soluciones concretas. No aceptamos que nos estén ninguneando y no nos den las respuestas que corresponde como ha ocurrido en estos días".

"No tengo un cargo; si 10 años de antigüedad. Queremos concursos ya", rezaba una de las banderas desplegadas por los maestros durante el acto que la delegación local del sindicato de docentes santafesino realizó en la plaza San Martín. Acompañados por trabajadores no docentes, que ayer también realizaron una jornada de protesta, y diferentes organizaciones sociales, los maestros hicieron públicos sus reclamos.

"Por un salario de 1800 pesos y el medio aguinaldo", decía otra bandera que portaba una docente, quien relató que "se está reclamando, como siempre, la recomposición salarial y que haya concursos. El último fue hace 12 años. El 82 por ciento móvil no está funcionando, han parado todas las jubilaciones y entonces no puede ingresar gente joven. Hay una serie de mentiras de parte del gobierno que no quiere blanquear la situación".

Al finalizar el acto, el secretario general de Amsafé Rosario, Gustavo Terés, indicó que la movilización de ayer "fue la mejor respuesta que le pueden dar los docentes al delegado de la Regional VI del Ministerio de Educación, Humberto Cancela, quien cuando estaba frente a un grado en las escuelas, participó de muchas de estas protestas. Que no se olvide de esto porque si no, expresa en sí mismo a aquellos funcionarios que cuando se pasan de mostrador se olvidan a quiénes tienen que defender".

La Regional VI había expresado en un comunicado que los docentes no estaban autorizados por el organismo a suspender las actividades y a desobligar a los alumnos con el fin de realizar una marcha, ya que la medida no está decretada como paro o huelga, y en tanto la responsabilidad recaía en las personas que ejecutaran la medida ya que no está encuadrada en la orgánica ministerial.

El reclamo por mejores condiciones edilicias fue otro de los puntos que llevó al dirigente gremial a expresar que "podríamos realizar una caravana para recorrer las decenas de escuelas que se encuentran en una situación paupérrima, mientras el gobierno no hace nada o muy poco".

La grave situación que están atravasendo los docentes reemplazantes -en algunos casos hay maestros que se encuentran en esta condición desde hace 12 años- necesita, como indicó Terés, "una respuesta urgente. Son 300 cargos que se pierden; el gobierno debería otorgarles un subsidio por desempleo, así como lo hizo con los empleados de los frigoríficos, y también extenderles la obra social por el tiempo que sea necesario".