CIUDAD › MIGUEL ZAMARINI PROPONE ELIMINAR LAS BOLSAS DE PLáSTICO
El presidente del Concejo hizo una contrapropuesta ante la iniciativa de la concejala macrista Julia Bonifacio para cobrar entre 25 y 40 centavos cada unidad que se entrega en el supermercado. Se recalienta el debate en la comisión.
› Por Claudio Socolsky
El presidente del Concejo Municipal, Miguel Zamarini (PS), presentó un proyecto para la eliminación total de las bolsas de plástico en los supermercados. La iniciativa llegó como contrapropuesta a la presentada hace unos días por la concejala María Julia Bonifacio (Pro), titular de la Comisión de Ecología y Medio Ambiente, quien plantea reducir la utilización de las bolsas a partir de que sean más grandes y resistentes, y que además se cobren. "Si queremos colaborar con el medio ambiente, en una situación que no tiene grises, la solución es eliminarlas, como ocurre en otras ciudades del país", afirmó el autor de la iniciativa que, según manifestó, cuenta con el aval del Taller Ecologista, la Cámara de Supermercados y el sindicato de Empleados de Comercio. Ayer, los ediles continuaron el debate en la reunión de comisión que recibió a representantes de las organizaciones ambientalistas Taller Ecologista y Los Verdes, del sindicato de Obreros Plásticos y Afines, y de la Cámara de Industrias Plásticas de Santa Fe.
A partir de las propuestas presentadas por los concejales Bonifacio y Zamarini, el debate en el Concejo Municipal por la utilización de bolsas de plástico en los supermercados, que en realidad lleva varios años discutiéndose en el Palacio Vasallo, promete recalentarse. La edila macrista pretende un rediseño de las bolsas para que sean más resistentes y grandes y puedan reutilizarse, ya sea como bolsa de residuo o para hacer las compras en los supermercados. Además, el proyecto contempla el cobro de esas bolsas de entre 25 y 40 centavos. Según Bonifacio, la estandarización de la bolsa en la ciudad de Buenos Aires logró reducir 50 por ciento su utilización y un 28 por ciento la cantidad de plástico.
La iniciativa del edil socialista, que cuenta con el acompañamiento de los concejales que integran el minibloque del Frente Progresista --Aldo Poy (PDP), Martín Rosúa (UCR), y Carlos Cossia (Peronismo Solidario)-- apunta a su total eliminación. La propuesta contempla que los comercios entreguen cajas o bolsas de cartón, papel o cualquier material no contaminante sin costo para que sus clientes puedan transportar las mercaderías adquiridas. Zamarini recordó ejemplos como los de la ciudad de Córdoba y las principales de la Patagonia donde los supermercados ya no ofrecen bolsas de plástico que contaminen el medio ambiente. "No queremos una bolsa que dañe menos sino eliminar de lleno la contaminación", precisó el titular del cuerpo.
"Después de tanto trabajo en la comisión sobre este tema, que venía con un consenso generalizado y que estaba por salir, habrá que empezar nuevamente de cero", se quejó Bonifacio en diálogo con Rosario/12.
"La realidad es que el proyecto está parado, más allá de que algunos concejales se comprometan a verlo y otros que plantean soluciones intermedias, tenemos que retrasar la conversación al inicio porque el proyecto de la prohibición está planteado desde el 2012, a partir de una iniciativa del entonces concejal (Alberto) Cortés, y que se trabajó en la comisión", agregó la edila macrista.
Según Bonifacio, en la reunión realizada ayer, de la que participaron representantes de organizaciones ecologistas rosarinas, se planteó qué era realmente lo que contaminaba, si el plástico como producto o su uso irracional. "Tratamos de abordar esa perspectiva, obviamente focalizándonos con los mismos criterios de las mismas propuestas de que si no vamos en el medio ambiente a utilizar grises, prohíbamos el plástico para sacarlo de circulación", argumentó la concejala refiriéndose al proyecto presentado por Zamarini.
La concejala comentó además que ayer se presentaron representantes del sindicato del Plástico a la reunión de comisión, preocupados por el proyecto de Zamarini, para manifestar que con la eliminación de las bolsas se verían afectadas unas 400 fuentes laborales. "Es importante remarcar que en la ciudad de Córdoba hay una ordenanza, sancionada en el 2011, que prohíbe las bolsas convencionales, permitiéndose las biodegradables, que las organizaciones ambientalistas no comparten porque está demostrado científicamente que siguen contaminando el ambiente", concluyó Bonifacio.
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