Invitada por legisladores provinciales y concejales de la ciudad de Rosario del Frente para la Victoria, la jueza María Laura Garrigós -titular del movimiento Justicia Legítima- estuvo disertando en Rosario y también se reunió con magistrados y otros funcionarios del Poder Judicial de la provincia. La jueza recorre el país con la intención de reestrablecer un adecuado marco de debate alrededor del ante proyecto de reforma del Código Penal. "Por suerte la democracia nos permite remediar esta situación de que con dos o tres slogans se derrumba todo un anteproyecto que fue minuciosamente estudiado y analizado", le dijo Garrigós a Rosario/12. "Por supuesto, hay que elevar el debate y permitir las modificaciones que haya que permitir pero desde un punto de viste serio, sin intereses políticos coyunturales. Por eso vamos a salir a divulgar los principales puntos del anteproyecto de reforma de Código Penal y no la falacia que se estuvo difundiendo a través de los medios de comunicación".

-Para empezar por los puntos más difundidos. ¿Es cierto que este nuevo Código habilita una baja generalizada de penas y extiende casi de manera indiscriminada las excarcelaciones?

-Hay 160 delitos que aumentan las penas en este anteproyecto y hay otros 145 que bajan sus penas. Esto se da porque estamos ordenando, por que el Código venía descalabrado: Era más grave a o mejor la pena por delitos contra la propiedad que por un homicidio. Así que ahora, ordenando todo eso en realidad hay un aumento de delitos que incrementarán sus penas, todo lo contrario a lo por ahí se difundió. Después hay que aclarar que las excarcelaciones no tienen que ver con el Código Penal, sino que dependen de los regímenes procesales de las distintas provincias porque este es un país que está federalmente concebido y ordenado. Lo que nosotros ponemos en discusión ahora es el Código de fondo y éste no trata específicamente las excarcelaciones. En realidad nadie va a quedar en libertad porque se sancione un nuevo Código y tampoco va a quedar todo el mundo en libertad. Por el contrario, cuando se aplica pena de prisión con este Código a diferencia de lo que está pasando hoy, la pena tiene que ser de efectivo cumplimiento.

-¿Por qué cree que está tan instalado en la gente esto de que la inseguridad se puede combatir más efectivamente con penas más duras y con más cárcel para los delitos?

-La verdad es que no lo sé a ciencia cierta, por qué sucede esto. Porque después de (Juan Carlos) Blumberg ya tendríamos que saber como argentinos que eso es mentira. Porque en ese momento y producto de las movilizaciones y la sensibilidad social sobre el tema, levantamos todas las penas contra los delitos contra la propiedad, las penas de los delitos cometidos con armas y no bajó el delito con todo eso. Todo lo contrario fue en aumento y sólo se detectó una baja vinculada a una mejora en la situación económica y a una mayor presencia del Estado en temas sensibles. Cuando tuvimos mejor reparto del ingreso per cápita, ahí sí se notó una baja sustancial de los delitos con lo cual a esta altura eso es algo que debería estar fuera de toda discusión. Y salvo que Naciones Unidas esté totalmente confundida, estas son las variables que influyen en el índice de violencia y delitos en un país.

-La justicia en Argentina, ¿ha mejorado en los últimos años de democracia como servicio de justicia o no ha avanzado tanto quizás como otras instituciones del Estado?

-No ha avanzado tanto porque es sabido que el Poder Judicial es un poder muy conservador, el más conservador de los tres poderes, y eso tiene que ver un poco con la idiosincrasia y otro poco con la composición del Poder Judicial. Para mí esa es una deuda pendiente: La Justicia aún le debe a la democracia una transformación adecuada a nuestro sistema político.

-¿Está familiarizada con los cambios que se han impulsado en la justicia santafesina? ¿Qué opina del nuevo sistema procesal penal?

-Sí estoy familiarizada, he estado hablando mucho en numerosas oportunidades con el doctor (ministro de la Corte) Daniel Erbertta y comparto su entusiasmo y alegría por estos cambios. Estoy totalmente de acuerdo con el nuevo rol de los fiscales en la investigación y la posibilidad de que los jueces nos dediquemos a lo que nos tenemos que dedicar en un régimen acusatorio. Yo anhelo que estos cambios lleguen a la Nación también. Por eso en su oportunidad Justicia Legítima se presentó también ante el ministerio de Justicia a pedirle que apoyara el proyecto federal de régimen acusatorio que hoy se está tratando en distintas comisiones de Diputados.