El Partido del Progreso Social (PPS) cumple 20 años y lo celebra hoy con un almuerzo para los militantes en el predio de La Rural. Pero la conmmemoración del aniversario del partido que encabeza el concejal Héctor Cavallero estará empañada por las diferencias internas, ya que un grupo de militantes referenciados con el diputado provincial Oscar Urruty y la concejala María Fernanda Gigliani dijeron que no fueron invitados al evento. Las diferencias políticas sobre la manera de encarar la proyección del PPS hacia el futuro fueron levantando temperatura en los últimos meses, y más allá de algunos indicios y rumores, este grupo ya tendría decidido oficializar esta situación en los próximos días. "No somos generadores de una ruptura, pero no nos dejan construir colectivamente", señalaron allegados a la concejala Gigliani. Desde el entorno de Cavallero aseguraron estar sorprendidos por esta situación, aunque plantearon que con ese grupo de militantes "no hay discusiones ideológicas, todo pasa por las candidaturas".

La versión sobre las diferencias en el PPS venía cobrando forma, al menos las que se filtraban tibiamente en los pasillos del Palacio Vasallo, fueron indisimulables desde la última sesión antes del receso de invierno, cuando Gigliani decidió abandonar su banca en pleno debate por la prohibición de estacionamiento en el centro. Los rumores se amplificaron tras conocerse que la edila, quien fue electa en el 2011 ocupando el tercer lugar en la lista del Frente Santa Fe para Todos, en el marco del acuerdo con el kirchnerismo rosarino, presentó una nota solicitando un permiso para ausentarse de la sesión del pasado 7 de agosto.

"Las relaciones no están muy bien, hay mucho malestar", confió por entonces a este diario un colaborador cercano del ex intendente, quien de todos modos pidió bajar los decibeles de la confrontación. La misma fuente subrayó además que en el PPS no se está hablando de una división en el bloque que conforman Cavallero y Lorena Giménez. "Acá hay compañeros que toman decisiones por su cuenta pero que nunca se discutieron, ni siquiera hubo posibilidades de poder charlarlo", agregó.

Desde el sector de Cavallero estaban molestos por el tema de las invitaciones para conmemorar hoy en La Rural los 20 años del partido con un multitudinario almuerzo para 1700 personas, que incluye arroz con pollo y helado. Cuando comenzaron a repartirse las tarjetas, voces autorizadas del Concejo confirmaban que un importante número de militantes del PPS, incluidos Gigliani y el diputado Urruty, que es el secretario General del partido, no estaban invitados al encuentro.

"Es una mentira absoluta", señaló uno de los organizadores del evento. "Hay una Junta Ejecutiva provincial que lo organizó. Si no venís, si no atendés el teléfono, si no respondés, no pueden decir que no los invitamos, estos compañeros se victimizan".

Lo cierto es que a partir que se acercaba la fecha del almuerzo también comenzaron a acelerarse los tiempos para que este grupo de militantes avance con la decisión de blanquear la ruptura que, según parece, se anunciará en los próximos días. "Desde noviembre vienen pasando muchísimas cosas. Casi ni se hablan. El Tigre llevó todo hacia un lugar que es difícil volver", plantearon allegados a este grupo de militantes que integran viejos compañeros de ruta del Tigre, peronistas, y muchos jóvenes, que apuestan a una reformulación del PPS.

Algunos indicios sobre estos planteos fueron descriptos en la semana por el diputado Urruty. Al ser consultado en el programa "En Profundidad" si Cavallero debería ser nuevamente candidato a intendente en Rosario, el legislador respondió: "Hoy por hoy tengo dudas. Tenemos que ver quiénes son los hombres que tienen una vocación de tomar la posta para ir cambiando también los ejes de la disputa política en los últimos años. Si nosotros generamos las mismas estrategias, muy probablemente tengamos los mismos resultados".

Más allá del respeto y el cariño que dijeron profesar por el líder del partido, allegados a Gigliani, que obtuvo la banca en el 2011 integrando el Frente Santa Fe para Todos a partir de un acuerdo con el kirchnerismo local, adelantaron que la edila buscará la reelección de su banca pero que lo hará desde otro lado. "Cavallero es el dueño del PPS, pero hay una intención entre varios compañeros para que Fernanda encabece una lista de concejales en 2015", expresaron desde el entorno de la edila, que tiene 31 años, milita en el PPS desde el 2001, y motorizó una serie de denuncias sobre casos emblemáticos como la construcción de la Torre Shopping en Arroyito, y la firma del convenio entre la Municipalidad y el club MOP para la ampliación de la guardería náutica, entre otros.

Para este sector; Cavallero, que será el único orador en el almuerzo organizado hoy para celebrar los 20 años del PPS, "tiene que colocarse en un lugar de candidatos más estratégico porque termina atentando contra lo colectivo. No somos generadores de una ruptura pero no nos dejan construir colectivamente". Ellos consideran que a fuerza de militancia lograron imponer el PPS y que no se reconozca solamente como el partido de Cavallero. Lo que sucederá de cara al 2015 es una incógnita, aunque desde este grupo dicen tener claro cuál será la discusión: "Queremos construir un partido al futuro, si no terminamos siempre discutiendo personas y no proyectos".