CIUDAD
Es el sentido de la campaña que mañana lanzará el municipio
para sensibilizar a la población respecto de los derechos de
los adultos mayores. Entre la dignidad y la autorrealización.
"Los derechos no tienen fecha de vencimiento" es el eslogan de la campaña de difusión que lanzará mañana la Municipalidad, para sensibilizar a la población sobre los derechos de los adultos mayores. Los concentran en cuatro palabras: dignidad, respeto, participación, autorrealización. Es que el envejecimiento de la población genera nuevas situaciones, como familias que optan por internar a sus ancianos ante las dificultades de contenerlos, y un sinfín de conflictos. Según datos del año pasado, el 17 por ciento de la población del aglomerado Rosario era mayor de 60 años. Ante esa realidad, la idea de esta campaña nació del presupuesto participativo. "Surgió como una preocupación de los vecinos y vecinas que participan de las reuniones. Así fue como le dimos forma a esta campaña que constará de volantes, afiches callejeros, mensajes radiales, frases en tarjetas de colectivo y trabajo con instituciones de adultos mayores como centros de jubilados", indicó Pedro Pavicich, secretario de Promoción Social de la Municipalidad, quien adelantó que en poco tiempo abrirán el tercer Centro de Día para personas mayores, en el Parque Oeste, que brinda un espacio de contención diurno donde los asistentes realizan actividades terapéuticas y recreativas.
Coordinada por la directora de la Tercera Edad, María Alcira Scarpone, la campaña hará eje en los derechos de las personas mayores a la integración y al acceso a una vida social basada en la igualdad de oportunidades y también a ser escuchados y respetados en sus tiempos, capacidades e intereses.
"Sobre todo, queremos difundir la necesidad de respetar la independencia de los adultos mayores, su libertad, que no quedan anuladas por la necesidad de cuidados especiales. Queremos que se tome conciencia del maltrato y el abuso que se ejerce sobre la vejez, cuando no se respeta su autodeterminación", advirtió Pavicich, quien consideró que un eje de la política con esta población es "no medicalizar, evitar la institucionalización, y respetar las potencialidades para que esta etapa de la vida se viva dignamente, activamente, con integración social".
Con estas consignas viene trabajando la Dirección de la Tercera Edad, que cuenta con el Hogar de Mayores, ubicado en Grandoli al 3400, destinado a hombres que no tienen familia o lugar de residencia, y pueden valerse por sí mismos aunque necesiten asistencia y contención institucional para resolver su vida cotidiana. En esa misma línea de trabajo, la Dirección implementa el sistema de viviendas compartidas, que en la actualidad se destinan a varones. Desde la Municipalidad, lo consideran una respuesta alternativa al ingreso a una institución que permite a las personas mayores preservar su entorno de independencia, favorece la inserción social y la autoestima. La propuesta consiste en una casa totalmente equipada y adaptada a sus necesidades para un grupo de cuatro personas. "En general, los que no tienen lazos familiares ni otros recursos son más hombres que mujeres", explicó Pavicich que las dos instituciones estén destinadas a ellos.
La dirección cuenta también con un programa de Asistencia e Intervención Directa ante situaciones de vulnerabilidad. "En la mayor parte de los casos recibimos el alerta de vecinos que perciben casos de extrema necesidad", explicó. Siempre la prioridad es mantener al adulto mayor en su entorno social y familiar, y por eso las soluciones son diversas y progresivas, según los casos.
Mientras tanto, desde la Escuela de Gerontología se trabaja en la capacitación a personas que tratan con adultos mayores, como es el curso de asistentes gerontológicos, pero también se organizan actividades que vinculan al Estado municipal con las organizaciones propias de los adultos mayores, como son los centros de jubilados.
Como se trata de evitar que los geriátricos en los casos de ancianos autoválidos o con otros recursos, la Municipalidad sostiene también dos centros de día, con capacidad para 30 personas cada uno. Funcionan en convenio con dos de las colectividades españolas, en los centros Asturiano y de Castilla, pero abiertos a toda la población. El horario es de 9 a 17. "Tenemos equipos de profesionales que organizan talleres, almuerzan y desarrollan todo tipo de actividades. Están destinados a brindarle una oportunidad a las familias que no pueden atenderlos durante toda la jornada, pero sin caer en la institucionalización", explicó Pavicich, quien adelantó que en breve se abrirá el tercer centro de día, en Parque Oeste, también con capacidad para 30 personas. Esta iniciativa fue otra de las que surgió del presupuesto participativo.
Los centros de día están destinados a mayores de 60 años que tienen dificultades de atención por parte de la familia, se encuentran en situación de soledad y aislamiento y tienen alguna dificultad temporaria en su autonomía. Entre las actividades terapéuticas el Centro ofrece programas de higiene y nutrición, terapia ocupacional, atención psicológica y gimnasia, como así también taller lúdico, caminatas y paseos, manualidades, pintura, dibujo y jardinería. Como complemento de sus actividades con los ancianos, brindan también apoyo a sus familias.
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