El fiscal de Cámaras N°1, Guillermo Camporini, informó a la Sala 3 de la Cámara de Apelación en lo Penal su desacuerdo con la decisión de archivar la causa por el derrumbe de un sector de muelles del Parque España que en su momento adoptó el juez Correccional Edgardo Bistoletti. El fiscal Camporini considera que deben continuar las investigaciones sobre las posibles responsabilidades que pudieron tener los funcionarios municipales y de otras reparticiones en el hecho. El juez Bistoletti había resuelto archivar la causa tras quince meses de investigación, alrededor del desmoronamiento ocurrido el domingo 13 de marzo del 2005, en el cual cuatro personas resultaron heridas. Camporini entiende que "no caben dudas

de que la Municipalidad, tenía pleno conocimiento de las falencias estructurales del muelle al menos desde el año 1994".

En su resolución, Bistoletti destacó la imposibilidad de individualizar a los responsables del derrumbe -habida cuenta de la cantidad de organismos y jurisdicciones involucradas-. Al mismo tiempo, el magistrado señaló que de haberse comprobado el delito de estrago culposo agravado, el mismo estaría prescripto ya que debiera imputarse las irregularidades a las autoridades que inauguraron el muelle en el año 1994. La fiscal Elida Rivoira anunció, extraoficialmente, que apelará la decisión de Bistoletti.

Ahora, el fiscal Camporini señala en su escrito que "causan agravio a este Ministerio Público los fundamentos del apreciado Magistrado para arribar al pronunciamiento de archivo toda vez que, aduce que el derrumbe del muelle fue producto de un accionar de la naturaleza que hizo que esta eligiera el tiempo de aleatoriedad para que una serie de factores coadyuvantes produjeran el aludido derrumbe, destacando entre otras cosas que la construcción del puerto de Rosario fue inaugurado en el año 1902, que la vida útil de gran parte de los pilotes de madera estaba superada y que, a pesar del mantenimiento efectuado por la Municipalidad se hace difícil estimar el mecanismo de falla que generó el hecho aquí investigado".

Y agrega que "no existe margen de duda (...) de que la Municipalidad de Rosario, tenía pleno conocimiento de las falencias estructurales del muelle al menos desde el año 1994 siendo, que en ningún momento se tomó medida alguna sea para restringir o prohibir la circulación de personas".