Pasado el mediodía del feriado de ayer, la calma era casi absoluta en las inmediaciones de 27 de Febrero y Paraguay. Por allí se desplazaba con su moto un policía de civil, franco de servicio. En ese contexto dos delincuentes intentaron robarle el rodado y el policía se identificó, dio la voz de alto y allí comenzó la balacera. Como consecuencia de la gran cantidad de disparos que intercambiaron un delincuente cayó herido y el otro huyó. El agente de la fuerza salió ileso.

El policía estaba esperando a un amigo con su moto y sin el uniforme. Fue abordado por dos sujetos que circulaban en otra motocicleta y a punta de pistola le robaron la moto. Según relataron testigos a Canal 3, el policía se identificó como integrante de la Unidad Regional II y ordenó a los delincuentes detener su marcha. Entre los tres iniciaron un feroz tiroteo y los delincuentes usaron los autos estacionados como escudos, ocultándose detrás.

Finalmente, uno de los asaltantes terminó herido en una de sus manos y fue derivado al Hospital de Emergencias Clemente Alvarez (Heca) para su asistencia. Previamente se había refugiado en una casa cercana pero fue inmediatamente descubierto por la policía que lo detuvo de inmediato.

El otro delincuente se dio a la fuga con la moto que circulaba, no pudiendo llevarse la del policía. En la calle, quedaron unas 26 vainas servidas y una gran conmoción en el barrio por los disparos en pleno mediodía. En la zona se desplegó un amplio operativo policial y el tránsito vehicular fue cortado.

"Era realmente impresionante la cantidad de disparos que se escucharon, no sabíamos de dónde venían", relató con dramatismo uno de los playeros que trabaja en la estación de servicio que está en la esquina de 27 de Febrero y Corrientes.

Lo balazos en la zona no son una novedad. Ayer todo ese sector del barrio recordaba otra balacera a la hora de la siesta, un sábado de septiembre de 2012, cuando a una cuadra de allí, en la esquina de Entre Ríos fue acribillado el Fantasma Paz. Emblemático homicidio que originó nada menos que la mayor causa por narcocriminalidad en la provincia: La causa Los Monos.

Por otra parte, ayer también se logró controlar un motín en la seccional 30º que había comenzado a la madrugada. Los internos allí detenidos se alzaron contra las autoridades y dos de ellos resultaron heridos. Un grupo de familiares de los reclusos se congregó en la puerta del edificio.

En total participaron unos 19 presos alojados en la comisaría ubicada en Superí al 3000, se sublevaron ocasionado una revuelta que dejó al menos dos heridos, uno por asfixia debido a la quema de colchones y el otro con heridas de escopeta. Las personas afectadas fueron atendidas en el lugar por personal del Sies.