El vicegobernador Jorge Henn se comprometió en las puertas del ex centro de detención La Calamita, en Granadero Baigorria, a avanzar en el proceso de expropiación de la finca, que hoy permanece en manos de privados, tal como lo sancionara la Legislatura quince días atrás, a partir de un proyecto impulsado por la diputada Alicia Gutiérrez. El presidente de la Cámara de Senadores hizo entrega de una copia de la ley a la organización Documenta Baigorria, que "trabaja en defensa de la memoria colectiva como una herramienta necesaria para pensar el futuro". Militantes de la entidad baigorriense confían que el proceso de traspaso al Estado sea veloz para que, finalmente, el Equipo Argentino de Antropología Forense analice el predio. "Eso es lo primero que hay que hacer, ni bien se logre la expropiación, la justicia tiene que determinar que acá se investigue, todavía no se ha investigado el terreno. Si hay gente enterrada, no lo sabemos", manifestó María Celia Fernández, referente del grupo.

Para los integrantes de Documenta Baigorria, acompañados también por la diputada provincial Erika Gonnet y el intendente local Adrián Maglia, el de ayer fue un paso más en el marco de la "lucha" que sostienen de manera inquebrantable para que La Calamita "no quede en el olvido". Por ese motivo, el gesto que tuvo Henn fue recibido con profunda emoción. "Sino, nadie sabría de la existencia de este lugar, nosotros hace más más de diez que desde distintas organizaciones populares, de vecinos y militantes, mantenemos viva la memoria y peleamos para que se adhiera a la ley de expropiación", aclaró Fernández, de voz firme y con mirada cargada de ilusión. Henn se reunirá en los próximos días con la Secretaría de Derechos Humanos de la Provincia para acelerar el trámite.

Todavía se mantiene en pie en las puertas de la quinta, ubicada en Eva Perón 1530, el primer cartel indicatorio que colocó Documenta Baigorria, hace ya varios años. Golpeado y oxidado, los agujeros de bala y la pintura que tapa a medias lo que fuera una descripción del ex centro clandestino de detención, dan cuenta que la lucha de los organismos de derechos humanos de la región encontró obstáculos. Pero ellos, de manera pacífica, continuaron en su objetivo. Por el cual ya dieron un paso decisivo, aunque no definitivo. "Nuestro mayor anhelo es que se pueda expropiar y se construya un centro de memoria", adelantó María Celia.

La quinta pertenece a la familia Benzadon, que no permite el ingreso al casco. Por esa razón, el acto simbólico (foto) se realizó en la tranquera de la finca, sobre la calle de tierra, a unos cien metros de la casona. ¿Cómo es el trato con los dueños? "No hay trato con los dueños, viven ahí, también varias familias más, pero les molesta mucho que vengamos, lógicamente porque es su casa. Es un lugar privado y lo tenemos que respetar. Estamos esperando la expropiación", explicó Fernández.

Gonnet, en tanto, valoró el "gran gesto" del vicegobernador. La diputada del Frente Para la Victoria, nacida en Baigorria, remarcó que es "muy importante para la gente de nuestra ciudad", que Henn se haya comprometido a finalizar el proceso de expropiación. "Tenemos diferentes miradas políticas pero estamos sentados en la misma mesa y hablando de un mismo tema. Es un día para celebrar", indicó la legisladora.

Las esperanzas de Documenta Baigorria están cifradas en que la justicia decida investigar y relevar al predio, a fin de que el Equipo Argentino de Antropología Forense realice excavaciones. "Pensamos que hay cuerpos enterrados", dijo Fernández. Solo una vez, en 2006, la justicia ordenó excavar, tras los dichos del represor Eduardo "Tucu" Constanzo, quien aseguró que una persona secuestrada había muerto La Calamita y le ordenaron enterrarla. Pero el trabajo arrojó resultados negativos.