La licitación del negocio inmobiliario en el ex Batallón 121, a cambio de urbanizar el Cordón Ayacucho, atrajo una sola oferta: la de una unión transitoria de empresas (UTE) integrada por la firma Petersen, Thiele & Cruz, más Helport SA y Pecam SA. Pertenecen, respectivamente, al grupo Petersen, presidido por Enrique Eskenazi y dueño del Nuevo Banco de Santa Fe; al empresario de medios Eduardo Eurnekian; y a Ricardo Griot, presidente de la delegación local de la Cámara Argentina de la Construcción. Construirán 1.200 departamentos en 5 hectáreas cedidas por la provincia, y los comercializarán. A cambio, tendrán que relocalizar viviendas precarias y abrir trece calles con infraestructura en la villa miseria de barrio Tablada situada en la zona de Ayacucho y Centeno.

"Este proyecto implica resolver el futuro de las 30 hectáreas que ocupó el Batallón 121", señaló el gobernador Antonio Bonfatti (foto). Se refirió a que además en ese predio se está radicando un polo de empresas tecnológicas, y se construirá el Museo del Deporte, la Biblioteca del Bicentenario, además de un centro de salud, escuelas, comisaría y parque.

"Es un nuevo proceso de urbanización de la ciudad que convertirá al predio en un espacio de disfrute para todos los rosarinos y cambiará la zona sur. Y además, cubre la resolución de una situación social con el mejoramiento del Cordón Ayacucho, con apertura de calles, cloacas y agua corriente en red", dijo Bonfatti.