La grave denuncia que hizo el ex intendente Héctor Cavallero sobre supuestos "hechos de corrupción por manejos de fondos", en el Servicio Público de la Vivienda y el Plan Hábitat; enfurecieron a hombres de la administración que encabeza Miguel Lifschitz. El jefe de la bancada de concejales del PS, Horacio Ghirardi aseguró a Rosario/12 que "es triste ver a un dirigente como Cavallero, en el final de su carrera política, mintiendo públicamente, siendo mandadero del justicialismo para llevar adelante campañas sucias". Y aseguró que el Plan Hábitat "está auditado a nivel local por el Tribunal de Cuentas, por la Nación y también a nivel internacional por el Banco Interamericano de Desarrollo. Es imposible, que en este marco, pasen las cosas que este hombre dice que pasan".

Luego de una reunión con el gobernador Jorge Obeid, Cavallero anunció desde Santa Fe que su Partido del Progreso Social, se integraba al Frente para la Victoria; aunque no quiso dar precisiones sobre su posible candidatura a intendente de Rosario. Fue en ese marco donde el actual jefe de la Casa de Santa Fe en Buenos Aires disparó: "Yo me voy a encargar de poner en blanco y negro. Primero sobre cuáles son los planes estratégicos de gestión que existen para la provincia, cuáles están funcionando y cuáles se proponen; y en segundo lugar, me voy a ocupar de hacer ver la falta de transparencia y los actos de corrupción que existen en el municipio de la ciudad de Rosario". Y siguió, "voy a denunciar en el Servicio Público de la Vivienda, con nombre y apellido, quiénes son las personas que han cobrado en dólares y que no podían hacerlo por el sólo hecho de que eran funcionarios municipales", lanzó Cavallero y hasta mencionó que esos manejos de fondos llegarían a "los dos millones de dólares".

El concejal Ghirardi descartó de plano la denuncia al señalar que "son todas ambigüedades. Esto mismo lo había intentado denunciar el ex concejal cavallerista (Ricardo) Marengo, y otras cosas más que nunca fueron comprobadas". El titular del bloque del PS aseguró que "hace más de quince años que nos buscan hechos de corrupción y nunca encuentran nada. No pueden entender que esta es una administración transparente", y relacionó la denuncia de Cavallero "con su lanzamiento político de la mano del justicialismo".

Ghirardi señaló que Cavallero, "viene a ser una especie de mandadero del PJ. Todo lo que los dirigentes del justicialismo no quieren o no se animan a decir, lo dirá él. Es triste ver a un dirigente de su trayectoria en un papel como ese, pero bueno, se ve que va a ser uno de los encargados de llevar adelante las campañas sucias para las próximas elecciones".

Para el socialista todas estas denuncias "no tienen sustento y tampoco tendrán un gran impacto en la sociedad porque la gente sabe, conoce, no es tonta. Además, tanto Binner como Lifschitz pasarán a la historia como dos intendentes que transformaron la ciudad, mientras que Cavallero quedará en el recuerdo como el Borocotó del menemismo. Como socio de uno de los gobiernos más corruptos de la historia que ahora pretende venir a dar lecciones de moral pública".