Una mujer de la comunidad gitana, acusada como parte de la banda de secuestradores virtuales desbaratada a mediados de año, fue condenada a tres años de prisión efectiva, por el delito de tentativa de extorsión, en juicio abreviado. Se trata de la primera sentencia en el marco de la causa que tiene a varios imputados de la comunidad romaní, por más de 130 hechos.

La pena contra Yanina Miguel fue por un intento de falso secuestro en 1º de Mayo y Mendoza, perpetrado en junio pasado. La víctima era una mujer que advirtió el ardid y llamó a la policía. La acusada, quien debía retirar el dinero de un volquete, fue arrestada en el playón del Hospital Italiano, mientras intentaba escapar en una camioneta Renault Daster.

Además, a uno de los cabecilla de la banda, Gustavo Miguel, alias "Masacote", le imputaron ayer dos nuevos hechos. En uno de ellos, llamó a una mujer, se hizo pasar por un conocido y le pidió plata. "Tu sobrino está en el banco y necesita el dinero", le dijo; y lo fue a buscar.

Tras la audiencia, el fiscal Nicolás Foppiani fue increpado verbalmente por familiares de los detenidos y presentó una denuncia por amenazas.

A seis meses del megaperativo que dio con la mayoría de los acusados, la causa obtuvo una primera condena: el juez Juan Carlos Curto homologó el acuerdo abreviado entre la fiscalía y la defensa de la imputada, que fue penada a tres años de prisión efectiva en la Alcaidía de Mujeres.

Los implicados están acusados de los delitos de asociación ilícita y extorsión, por 136 secuestros virtuales (algunos en tentativa).