Juan José Muga tiene 58 años. Es misionero y es un personaje extraño. En su persona se reúnen imágenes casi contradictorias: las de un sujeto conocedor de manejos policiales y de códigos tumberos. Por momentos una versión remozada de un temerario que denuncia la injusticia, al tiempo que lucha por defender sus desfavorables posiciones, con la de una víctima de un sistema corrupto, o con la de un buscavidas capaz de amañar algunos relatos en su favor. Lo cierto es que esta semana fue condenado a siete años y medio de prisión por el Tribunal Oral Federal Nº2 de Rosario, por transporte de estupefacientes. Luego de la sentencia accedió a hablar con este cronista, ante quien desgranó el origen de todo su padecer: un operativo armado por gendarmes misioneros que lo llevó a investigarlos y descubrir que trabajaban con una pata rosarina, al extremo de facilitarles la compra de armas para bandas locales que operan bajo la protección policial. Por si quedaban dudas en esta entrevista lanza además un nombre que podría avalar la historia: Ramón Machuca, alias Monchi Cantero. "Ojalá cuente su verdad asi desaparece Drogas Peligrosas" afirma ante Rosario/12 convencido de que pronto pasará. Con esos datos llegó a Rosario a entrevistarse con la que entonces para muchos era la jueza antinarcos: La camarista federal Laura Ines Cosidoy. Pero dice que lo traicionó y lo entregó a los mismos narcopolicías.

-¿Cómo tomó la sentencia?

-No estoy de acuerdo con esta sentencia porque puedo probar todo: hay una denuncia en el Ministerio de Seguridad de la Nación, en el caso Posadas en la cual intervino la ministra Nilda Garré y la secretaria Cristina Camaño quienes tomaron cartas en el asunto por una causa armada en la cual quedaron detenidos varios integrantes de gendarmería nacional. Con eso queda fehacientemente demostrado de que la causa de Posadas fue armada, al igual que esta. Pero hay una diferencia y es que la justicia de Posadas, cuando no hay transparencia en los procedimientos, respalda al damnificado y le da facilidad para poder defenderse. En cambio aquí en Rosario no. Yo lo vivo desde el año 2012 cuando me detienen y me arman la causa integrantes de Inteligencia de Drogas Peligrosas, sabiendo de que yo ya hacía dos o tres días que estaba en Rosario. Por eso digo que la fiscal Saccone es cómplice de los policías, porque no puede admitir de que las bolsas de consorcio las puso la policía. La fiscal Saccone rechazó todas la nulidades y avaló todo el accionar de la policía, siendo que ya en el año 2012 le advertí al juez (Marcelo) Bailaque que Rosario iba a ser una segunda Sinaloa ( México) porque nosotros en Posadas sabíamos, entendíamos eso por la gran cantidad de armas que fueron a comprar al Paraguay, operación en la que se invirtió casi un millón de pesos en armamento.

--¿Quiénes compraron las armas y quienes las trajeron a Rosario, bandas rosarinas?

-- Los policías de Inteligencia de Drogas de Rosario hicieron de nexo para esa compra. Y las compró gente que trabajaba para ellos.

-- Y en manos de quiénes están esas armas, ¿de narcos o de sicarios?

-- Fueron a parar a manos de gente que están amparados por estos policías. Así quedará demostrado cuando el señor Monchi Cantero agarre y saque a relucir todas sus verdades. Quédense tranquilos que Drogas Peligrosas ahí desaparece.

--¿Porqué Muga?

--Porque tengo la credibilidad de que Monchi va a hablar y decir toda la verdad.

--¿Esto es un mensaje para Monchi Cantero?

--Es un mensaje a la sociedad.

--¿Usted declaró ante el juez Bailaque?

-- Si, por eso queda demostrado que aquí hay una gran complicidad en lo que respecta al juzgado federal (Nº4) y al gobierno de la provincia de Santa Fe, porque no ofrece ninguna seguridad hacia la sociedad. Todo lo que he declarado ante el juez Bailaque se hizo todo realidad.

--¿Qué había dicho?

--Lo que dije al doctor Bailaque es porque él no paraba esto mientras los narcopolicías fomentaban todo lo que respecta a la inseguridad de la sociedad de Rosario, y ellos miraban para otro lado. Pero el juez no me hizo lugar a nada, al contrario a los dos días me voló de Rosario y me mandó a Buenos Aires con mi hijo, que paga un plato roto, porque nada tiene que ver con esta causa, y está preso por el solo hecho de haber estado en el auto conmigo.

--Usted dice que con su denuncia desbarata una banda narco de gendarmes en Posadas, y viene a Rosario y denuncia a la cúpula antidrogas de Rosario. ¿Usted es una especie de superhéroe? ¿Que partida juega usted juntándose con la camarista Laura Cosidoy y le entrega los nombres de los policías narcos de esta ciudad? ¿Que es lo usted busca?

--Es una pregunta muy coherente. No juego al superhéroe, solo quiero transparencia. En el año 2010 fui damnificado por gente de Gendarmería nacional que me armó un operativo, entonces ahí viene la respuesta, porque me molestó mucho lo que me pasó en Posadas porque estuve dos meses detenido. Esos gendarmes estaban conectados con la policía de Rosario.

--¿Cómo era esa conexión?

--Gente vinculada al narcotráfico de gendarmería de Posadas con Inteligencia de Drogas de Rosario. Mientras los gendarmes empujaban la droga hacia acá, el trabajo de la policía de drogas se encargaba de fomentar el narcotráfico en Rosario.

--¿Que tipo de acciones hacían?

--Como el caso bien entendido del operativo de los 400 kilos de pasta base secuestrado. (Muga se refiere en este caso al operativo Flipper donde fue detenido Delfín Zacarías, en la que también cayeron policías provinciales. Muga no quiere profundizar el punto porque comparte encierro en la cárcel de Devoto con el principal imputado en la causa)

--Hay quienes sostienen que todo esto es una excusa, un manotazo de ahogado para salvarse de una condena...

--Un manotazo de ahogado no es por el simple hecho de que hace cuatro años que estoy preso y procesado. Cuatro años en los que me tienen tirado como un perro y me pasearon por todos lados.. Yo en verdad tenía asumido que estaba condenado, es más se lo había dicho a mi defensor: al estar cuatro años procesado es evidente que uno ya está condenado. O sea no es que me iban a dar la absolución ni nada por el estilo, porque no les conviene.

--¿Que información le dió usted a la camarista Laura Cosidoy?

--Con la jueza Cosidoy me reuní cuando vivía un momento crítico en Posadas, advirtiéndole lo que pasaba acá en Rosario, y que era lo que hacía la policía de Rosario, desconociendo yo que Fernando Romitti, Oscar Romero y Chino Paz, y otros de su camada, tenían afinidad muy cercana a la doctora Cosidoy.

--¿Porqué eligió hablar con Cosidoy y no con un fiscal?

--Porque tenía entendido que la doctora Cosidoy manejaba todo en este juzgado (el de Bailaque). Entonces, sin gran conocimiento de este juzgado, fui a lo mejor mal asesorado al llegar a ella.

--¿Quién le recomendó que llegara a ella?

--Una persona que estuvo acá en Rosario que ahora está en Misiones, pero no puedo decir su nombre. (En sus palabras finales Muga adujo que la esposa de un gendarme que trabajaba cerca de Cosidoy le recomendó verla)

--¿Se sintió traicionado por Cosidoy?

--Ciertamente sí me sentí traicionado, porque ella filtró la información a la gente de Drogas Peligrosas.

--¿Porqué su defensor no pidió que la citaran en esta causa?

--Es un gran interrogante porque si bien no se lo pedí, lo tendría que haber pedido él por su cuenta. Pero la pregunta es porqué la fiscal Adriana Saccone no citó a Cosidoy como testigo. Así queda demostrado que la fiscal Saccone la cubre a la doctora Cosidoy y a los integrantes de Drogas Peligrosas. Y estos no son policías sino narcopolicías, porque quedó demostrado que ellos manejaban el narcotráfico acá en Rosario.

--¿Usted asegura que le plantaron la droga en el operativo?

--Si señor, esa droga fue plantada.

--Parece una gran cantidad para ser colocada ilegalmente, son más de cuarenta kilos, más de sesenta panes...

--La sección Inteligencia de Drogas maneja en su poder gran cantidad de drogas con el consentimiento de este juzgado. Le doy el caso Cañete: unos días después de mi detención en setiembre de 2012 lo agarran a bordo de una avioneta en una localidad cercana a Rosario, con 500 kilos de marihuana, pero en el juzgado al que denuncio que es el del doctor Bailaque hicieron figurar sólo 250 kilos. Es que mientras le pegaban a Cañete una camioneta cuatro por cuatro cargaba los otros 250 kilos de marihuana. Dónde fueron a parar? Y eso lo hizo Inteligencia de Drogas y consta en el juzgado federal Nº 4 del doctor Bailaque.

--Usted advierte que con un fallo condenatorio sus versiones quedan desacreditadas, es decir que la justicia convalidó el operativo y condenó a todos los procesados. No siente que su palabra no ha sido fundamentada.

-- Si, mis palabras siempre fueron puestas en cuestión porque haciendo un seguimiento en los diarios, siempre fui cuestionado, nunca tuve credibilidad, al contrario. Pero hoy queda demostrado que en Rosario no se va a terminar el narcotráfico mientras siga esta clase de justicia, que tiene mucho que cambiar, porque también son partícipes de lo que está pasando con la seguridad y con el narcotráfico aquí en Rosario.

--¿Porqué pidió protección para su familia?

--Porque no hay ninguna seguridad para mi familia. Y no la pedí por miedo a sicarios ni nada por el estilo, sino que le tengo miedo a la policía. Y eso es vergonzoso.