El Colegio de Abogados de Rosario resolvió ayer en asamblea no participar del Plan Estratégico de la Reforma del Poder Judicial, por considerar el proceso como "poco transparente y participativo", según indicó su presidente Arturo Araujo. La ley de estado judicial -que permite que los jueces jubilados sigan formando parte del sistema de justicia- fue una de las diferencias insalvables, así como "la falta de descisión política para incorporar al debate la forma de designación y remoción de los magistrados". Araujo también criticó la "exagerada" representación del Poder Judicial en la Comisión.

El presidente del Colegio de Abogados aseguró que "no están dadas las condiciones para participar en un plan que no es lo transparente y participativo que el Colegio desea, porque no incorpora al debate temas fundamentales".

La asamblea de abogados rosarinos -que contó con la presencia de un centenar de profesionales sobre 6400 matriculados- resolvió no participar en el Plan Estratégico para la reforma del Poder Judicial porque no se ha excluído del temario "estado judicial", esto es la posibilidad de que los magistrados jubilados se reincorporen a la actividad y reciban algún tipo de asignación complementaria.

"Tampoco se tuvo decisión política para avanzar en la discusión de la remoción y la designación de magistrados. Este es un tema -agregó Araujo- en que el estado provincial no le puso el énfasis necesario en un momento y ahora que se pueden incorporar estos temas no advertimos que haya empeño en los tres poderes para abordarlo. Es más, en el temario original no se incluyó la designación y la remoción, que evidencia que no hay descisión política seria y firme", aseguró Araujo.

El tercer punto tiene relación con el Código de Procedimientos en lo Penal, sobre el cual el Consejo rector emitió un dictamen que tiene estado legislativo. "Justamente en la asamblea se escucharon ideas adversas porque tiene algunos déficits, sobre todo la forma cómo afecta la oralidad, así como no es claro el rol de los fiscales y defensores, y mucho más discutida aún la entrada en vigencia del nuevo Código, que queda subordinado a una comisión".

El cuarto punto es que causó una "pésima impresión, una reacción desfavorable la nota del doctor Rafael Gutiérrez a nuestro Colegio sobre diversos temas que pedimos incorporar: la respuesta que la asamblea estaba pidiendo la vehiculiza Gutiérrez en términos improcedentes porque abre juicios sobre la forma de manejarnos para decidir los mismos, es decir en asamblea. Y en rigor como somos respetuosos de la forma en que las instituciones del Consejo rector deciden su forma de discusión

queremos que se respeten las nuestras", dijo Araujo.

Sin embargo remarcó que "esto no singifica no participar en los procesos de reforma de los códigos pero lo haremos por fuera del Plan Estratégico, a través de proyectos alternativos que enviaremos a la Legislatura".

El presidente del Colegio apuntó claramente su crítica "al mecanismo que se ha adoptado para reformar la justicia: en el Consejo rector se nota una abultada, exagerada representación del Poder Judicial ya que participan los seis miembros de la Corte provincial y con derecho a voto y cada uno los cinco colegios de abogados de la provincia, con un voto cada uno".

"No digo que no participen los magistrados -acotó- pero en una proporción adecuada. Y a esto hay que sumar el Colegio de Magistrados y el Procurador de la Corte, además de un diputado y senador, un representante del gobernador, uno del Ministerio de Gobierno y el Secretario de Justicia. Esto desbalancea el Consejo rector de la reforma".