"Los asesinatos de las Tres A son crímenes de lesa humanidad y por tanto imprescriptibles", dijo la titular de la Unidad de Asistencia para la Causas por Violaciones a los Derechos Humanos, Griselda Tessio, que en el mes de febrero presentará la requisitoria para la apertura de la causa que investigue la muerte del dirigente peronista Constantino Razzetti, a quien distintas voces consideran como la primera víctima fatal de la Alianza Anticomunista Argentina en Rosario. En ese sentido se expidió ya el fiscal general Claudio Palacín que habló de que es necesario la apertura de un "proceso penal, integral, profundo y pleno", aunque Tessio dijo que aun debía estudiar el expediente para pedir la apertura de la causa como proceso penal o en el marco de un juicio por la Verdad Histórica, en el que no hay imputados. A partir de la decisión del juez federal Norberto Oyarbide que decidió calificar como delitos de lesa humanidad los crímenes de la organización derechista Triple A toma mayor envergadura la presentación realizada por el hijo menor de quien era vicepresidente del Banco Municipal de Rosario, Carlos Razzetti, para que el crimen de su padre sea considerado de "lesa humanidad". También la presidenta del Centro de Estudios e Investigación en Derechos Humanos de la Facultad de Derecho, Matilde Bruera, compartió la calificación de "crímenes de lesa humanidad" para los hechos de la AAA y recordó que la primera víctima en Rosario fue Constantino Razzetti.

Carlos Razzetti, el hijo menor de Constantino, espera que en febrero se abra una causa penal amplia para investigar el asesinato de su padre -que fue el 14 de octubre de 1973 frente a su domicilio de calle San Lorenzo 2674- como un delito de lesa humanidad y por lo tanto imprescriptible. En ese sentido ya se expidió el fiscal general Claudio Palacín cuando en su resolución de comienzos de diciembre dejó en firme la decisión del juez Germán Sutter Schneider en cuanto a la apertura de una nueva causa -en la que se abrió hace 30 años nada se investigó- y avanzó sobre el criterio del magistrado de hacerlo como un juicio por la Verdad Histórico, en el que no hay imputados, para sostener que es necesario un "proceso penal, integral, profundo y pleno".

La fiscal Tessio, a cargo de la Unidad de Asistencia para Causas por Violaciones a los Derechos Humanos -a quien dio intervención el fiscal general Claudio Palacín-, comparte el criterio de que los crímenes de la Triple A son "delitos de lesa humanidad". En cuanto al pedido de que se investigue el crimen de Razzetti dijo que no había estudiado el expediente en detalles para resolver como se abrirá la requisitoria y si lo hará como causa por la Verdad Histórica, la alternativa utilizada cuando no estaban derogadas las leyes de impunidad, o como trámite penal. "Aunque se abriera por averiguación de la Verdad Histórica no queda restringida la posibilidad de la posterior criminalización cuando se produzcan las pruebas", dijo. De todos modos insistió en que su criterio y el de muchos fiscales que trabajan en el área de derechos humanos es que los de las Tres A fueron "crímenes de lesa humanidad". También señaló respecto de la decisión del juez federal Norberto Oyarbide, en el sentido de considerar así los delitos cometidos por la AAA antes del golpe de Estado del 24 de marzo de 1976, que en Buenos Aires "puede haber testigos mucho más cercanos al poder. Cuando nos alejamos geográficamente esos testimonios no aparecen tan fuertes, hay indicios y sospechas acerca de quiénes eran y ahora habrá que probarlo".

Tessio insistió en que si bien no había líneas de trabajo desde la procuraduría general de la Nación "muchos de los fiscales los consideramos delitos de lesa humanidad y por lo tanto imprescriptibles". La intervención de Tessio fue expresamente pedida por el fiscal Palacín que dejó sin efecto la oposición que había planteado en primera instancia la fiscal Adriana Saccone para que el juicio se abra en el fuero federal.

Desde el Centro de Estudios e Investigación en Derechos Humanos "Dr. Juan Carlos Gardella" de la Facultad de Derecho, su presidenta Matilde Bruera dijo a Rosario/12 que comparte la calificación de delitos de lesa humanidad para los crímenes cometidos por las Tres A y recordó entonces que la primera víctima en Rosario de la Alianza Anticomunista Argentina fue Constantino Razzetti. También recordó que el profesor Juan Carlos Gardella cuyo nombre lleva hoy el centro de la facultad fue víctima de la persecución de Triple A por lo que debió exiliarse del país.

Bruera explicó que se trataba de una "organización paraestatal cuyos miembros, la mayoría, pertenecían a las distintas fuerzas de seguridad que actuaban en la clandestinidad en combinación con civiles, tenían logística y utilizaban la estructura del Estado, por lo tanto sus crímenes son asimilables a los del terrorismo de Estado" y también recordó que los integrantes de la alianza tenían un accionar sistemático de persecución a los mismos grupos sociales y políticos que persiguió luego el terrorismo de Estado por lo tanto integraron el terrorismo de Estado. "La diferencia entre el accionar de la AAA y el posterior de la dictadura es que la política de terror y de persecución se oficializó".

La presidenta del Centro de Estudios e Investigación en Derechos Humanos dice que lo que menciona no es sólo una opinión sino que esa postura tiene un marco teórico en la dogmática penal por lo que cita al especialista alemán Claus Roxin que estudió los crímenes cometidos durante la Segunda Guerra Mundial, en especial el caso de Adolf Eichmann. "Allí analiza la autoría del aparato de poder organizado a través del estado terrorista como de las organizaciones paraestatales".