Si bien las plazas hoteleras de la ciudad no están ocupadas en su totalidad, la cantidad de turistas extranjeros que visitaron Rosario en la primera quincena del año en comparación con el mismo período del 2006 creció un 23 por ciento, en su mayoría provenientes de Europa, Australia e Israel. En ese lapso se incrementó también el número de visitantes nacionales, un 15 por ciento, fundamentalmente llegados desde Capital Federal y Gran Buenos Aires. "Rosario dejó de ser una ciudad dormitorio, donde los turistas dormían porque estaban de paso, ahora la han incorporado definitivamente a su itinerario", explicó Adriana Giromini, directora técnica del Ente Turístico Rosario. En ese marco la funcionaria destacó el rol que juegan los "hostels" -albergues juveniles-: en dos años abrieron 13 con capacidad para alojar a 400 personas a bajo costo.

En diálogo con Rosario/12, Giromini precisó que los datos ayer difundidos correspondían a la cantidad de consultas recepcionadas en las oficinas del Etur (la central en avenida Belgrano y Buenos Aires y en la Terminal de Omnibus Mariano Moreno). "Hay muchos turistas que no pasan por nuestras oficinas", aclaró reforzando la tendencia.

En la actualidad la ciudad tiene 7200 plazas hoteleras más las 400 camas disponibles en los hostels. "Los meses de verano no eran tradicionalmente favorables en materia turística para Rosario, pero en estos últimos años hubo un fuerte crecimiento", admitió la directora del Etur.

Por caso, Giromini apuntó que desde la apertura del primer hostel (el 30 de diciembre de 2004, La Casona de Don Jaime, en Presidente Roca entre San Luis y San Juan) a la fecha fueron en total 13 los albergues juveniles que abrieron sus puertas. "Este dato sólo, para una ciudad como Rosario es por demás representativo del fenómeno", agregó.

En estos albergues se hospedan jóvenes, que hacen un turismo más bien gasolero, incluso en el caso de las personas que llegan del exterior. "Más allá del tipo de cambio que los favorece los jóvenes extranjeros que llegan a Rosario lo hacen con su mochila y con ganas de recorrer el país y parte de América. Por lo general no son de ir a hacer compras a los shoppings, son de caminar mucho y conocen la ciudad desde otra mirada. En sus propios países son de clase media y respetan ese perfil también en la Argentina", precisó la funcionaria municipal.

Entre los turistas extranjeros que llegaron a la ciudad en los primeros quince días del 2007, abundaron los europeos (italianos, holandeses y españoles), australianos, israelíes y también brasileros. Entre los visitantes argentinos que desembarcaron en Rosario "la gran mayoría fueron de Capital Federal y algunas localidades del Gran Buenos Aires".

- En base a estos datos, a su entener, Rosario se ha convertido en un polo turístico?, preguntó Rosario/12 a Giromini.

- Estamos creciendo paulatinamente, falta para hablar de polo turístico. Lo importantes es que Rosario ha dejado de ser una ciudad dormitorio donde los turistas llegaban de paso para dormir cuando viajaban por ejemplo desde Córdoba a Buenos Aires, o desde Mendoza hacia Punta del Este. Ahora lo que notamos es que los turistas han incorporado a Rosario en su itinerario dentro de lo que es la región litoral. Hemos avanzado mucho en la infraestructura que le ofrecemos al turista, en la mayoría de los servicios, el río y todos sus atractivos también juega un rol importante. Lo más destacado es que los turistas se van de Rosario muy satisfechos, muy conformes con lo que les dio la ciudad.