Miguel Zamarini, y la mayoría de los concejales rosarinos que hicieron causa común con sus declaraciones, se refirió en términos muy duros a la Ley 12.065, llamada Ley Borgonovo, que redujo a la mitad el número de concejales en Rosario y Sante Fe. Y teniendo en cuenta que pocos días atrás fue el propio gobernador Hermes Binner quien al opinar sobre el tema consideró que para él se trató de una "medida acertada", el debate siguió abierto.

Ayer, en el acto de asunción de Angel Elías en la sede del Enapro, Rosario/12 le preguntó al mandatario provincial si las declaraciones del titular del Concejo rosarino lo habían sorprendido. Binner sostuvo que "si tienen alguna demanda al respecto, deben resolverlo por vía Legislativa. De manera que para nosotros, si una ciudad quiere tener 50 concejales y la Legislatura se los aprueba, y la ciudad los puede pagar, no hay ningún problema".

El gobernador agregó que por eso "nosotros buscamos las autonomías de los municipios, que sean los municipios los que decidan el número de representantes que creen conveniente".

"La ley Borgonovo ha perjudicado a las minorías, en el de caso de nuestro Concejo las minorías no tienen representación cuando hay victorias electorales fuertes, como tuvo el socialismo. Pienso que hay que respetar a las minorías y a la oposición, y que el Concejo tiene que ser bien pluralista", había dicho Zamarini.