Jueves 27 de agosto, 18 horas. La primavera se aldelantó en la Plaza 25 de Mayo para la última ronda de las Madres antes del inicio de los juicios por Terrorismo de Estado. Mientras Chiche Massa, Norma de Vermeulen y Noemí de De Vincenzo dejan un ramo de flores en el pequeño monolito que recuerda a los desaparecidos; un hombre mayor sentado en un banco a escasos metros de ellas las observa: Es José Vicente Parpal López, 82 años, teniente coronel retirado del Ejército quien desliza jactancioso "tataranieto del Brigader Estanislao López". Aunque esta no será la única sorpresa de la nota. De lejos y de día, sentado en un banco de la plaza parece un viejito bueno. Sin embargo muchos rosarinos lo conocen, por el solo hecho de verlo acodado, elegante en la barra de Pan y Manteca o en El Cairo, tomando wiskhie al anochecer, quizas tratando de burlar a los fantasmas. "Fui ayudante del general Leopoldo Fortunato Galtieri entre los años 1977 y 1979, que fue cuando me fui", confesó a Rosario/12.

Después explicó su presencia en la Plaza de Mayo con otra excusa: "Vivo en la esquina de Laprida y Córdoba así que vengo a menudo a la Plaza". Justo esta misma tarde en que la plaza recibe a las viejas con sus pañuelos blancos.

¿Cómo lo recuerda al general Galtieri?

No tengo ningún problema de recordarlo. Lo recuerdo bien, no le puedo decir otra cosa. No puedo hablar cómo era como persona.

¿Cómo era como jefe?

Bien, pero no le puedo decir más.

Usted fue su ayudante durante la peor parte de la dictadura argentina. ¿Qué recuerda de esa época?

Yo recuerdo cosas que se han aumentado, que se han mentido. Yo gracias a Dios no tuve ningún problema. Me fuí, me retiré, y no tuve ningún problema de nada. Estuve de interventor del Sindicato de Petroquímicos durante dos años y medio de gobierno constitucional hasta mediados de 1985. Y nadie me dijo nada, tengo cinco hijos y no tuvieron nunca ningún problema con mi apellido. Nunca fui citado a declarar por nada.

¿Le encomendó Galtieri alguna tarea especial?

A mí no.

¿Alguna vez presenció alguna escena que no le gustara junto a Galtieri?

No, yo no puedo decir nada.

¿Por qué dice que se ha mentido y exagerado?

Porque hay muchas cosas que pueden ser verdades y otras que son mentiras.

¿Cuáles son esas mentiras?

Yo no puedo decirlas, no.

¿Qué es lo que le molesta de lo que se cuenta?

Mire yo viví bien, viví tranquilo, y no tuve problemas.

Hace unos minutos las Madres de Plaza de Mayo dijeron aquí en esta Plaza que desaparecieron más de 500 personas en esta región donde usted dice que vivió tranquilo...

Mire, no estuve nunca en ningún lugar donde hubiese desaparecido una sola persona.

¿Nunca vio nada irregular al lado de Galtieri, gente torturada asesinada?

No, no, no.

¿No se arrepiente de nada que le haya tocado hacer?

No, del momento que camino tranquilamente por la calle sin ningún problema, es que no tengo ningún problema.