El comisario inspector Daniel Puyol (foto), quien hasta hace pocas semanas estaba al frente de la Agrupación de Unidades Especial de la Unidad Regional XVII, esta siendo investigado por enriquecimiento ilícito desde el 7 de febrero. Puyol fue desplazado de su cargo en medio de fuertes acusaciones que lo involucran con el caso de Paula Perassi, la mujer que permanece desaparecida desde septiembre de 2011. La decisión coincidió con el pedido del procurador general de la Corte Jorge Barraguirre para que se investigue el patrimonio del funcionario y su familia. Según el padre de Paula Perassi, Puyol cuenta entre sus bienes con una flota de más de una decena de camiones, que se presume están a nombre de su esposa.

Hace más de dos años que Puyol es blanco de fuertes acusaciones por parte de la familia Perassi, que le imputa encubrir la desaparición de la mujer --de por entonces 36 años y madre de dos hijos--, quien fue vista por última vez el 18 de septiembre de 2011 cuando salió de su casa, de la ciudad de San Lorenzo.

La causa fue caratulada como homicidio, ya que el propio entorno de Paula sostuvo desde un principio que fue asesinada por mantener una relación extramatrimonial con un empresario de la zona, y con el objetivo de ocultar un embarazo. El amante, Gabriel Strumia, y uno de sus empleados, Antonio Darío Díaz, fueron procesados por la Justicia pero más tarde quedaron desvinculados de la causa.

Entre las pruebas recolectadas hay una particular, que a la familia de Paula siempre le hizo ruido. Se trata de una comunicación telefónica (mediante Nextel) entre Strumia y el comisario Puyol en el momento en que el padre de Perassi realizaba la denuncia por la desaparición de su hija.

Tras la denuncia, la investigación pasó a estar a cago de Puyol, pero la misma no avanzó, al menos como la familia de Paula esperaba. Eso hizo sospechar al padre de Paula, quien por sugerencia de Strumia (antes de conocer que era amante de su hija), fue a denunciar el hecho en la Agrupación Unidades Especiales de San Lorenzo.

Tiempo después, Alberto Perassi presentó ante el fiscal Román Moscetta una serie de elementos con los cuales el funcionario judicial presentó ante el juez Eduardo Filocco un pedido para que se investigue al comisario Puyol, ante la sospecha de que incrementó sustancialmente su patrimonio en los últimos años.

El 7 de febrero, el procurador Barraguirre, luego de evaluar la solicitud, pidió que la Dirección General de Asuntos Internos investigue los bienes del funcionario y los de su familia.

También pesó en su decisión que en más de una oportunidad los padres de Paula habían hecho pública la desconfianza en el jefe policial por tener una fortuna "injustificable", además de acusarlo de encubrimiento por la desaparición de la joven a raíz de una estrecha amistad con el amante y principal sospechoso de la causa.