La asamblea de trabajadores del Instituto de Recuperación del Adolescente de Rosario (IRAR) denunció durante el debate la "alarmante situación" que atraviesan los jóvenes alojados y los trabajadores que desarrollan tareas. A partir de los oficios emanados el pasado 6 de agosto de los juzgados de Menores de Rosario y San Lorenzo, que ordenaban efectivizar el traslado de los jóvenes alojados en IRAR a otro centro de detención de puertas cerradas dependiente del Servicio Penitenciario, desde la asamblea se opusieron al traslado "intempestivo" de los jóvenes por desatender toda normativa nacional e internacional sobre protección de derechos de la infancia, y se comprometieron a seguir denunciando el "incumplimiento de condiciones mínimas que garanticen la dignidad del tránsito de los jóvenes y los trabajadores". Entre otros reclamos, exigieron la implementación del Comité mixto de salud y seguridad en el trabajo, y discutir seriamente políticas de justicia penal juvenil. Además, informaron que el cuerpo de trabajadores se vio reducido exponencialmente (acompañantes juveniles y profesionales) lo que agrava las posibilidades de intervención acordes a las particularidades de cada joven y basadas en la posibilidad de restituir derechos. En ese marco, agregaron, resulta alarmante que durante el horario nocturno no sea garantizada la "presencia civil", y denunciaron que las condiciones de habitabilidad continúan sin garantizarse dada la sobrepoblación vigente. Por tal motivo, exigieron las "intervenciones pertinentes" a las áreas estatales de Niñez y Adolescencia, a la Comisión de Derechos y Garantías de la Cámara de Diputados provincial y a los juzgados de Menores de Rosario y San Lorenzo. Los trabajadores brindarán mañana a las 11 una conferencia de prensa en las puertas del IRAR, Saavedra y Cullen.