Este es mi espacio de relax, donde me siento a desconectarme de todo lo que hago. La bañera también es un lugar de encuentro con Pablo, mi pareja. Nos pasamos horas hablando ahí adentro.

1. Libros

Soy profesor en Letras, así que los libros son indispensables en mi vida. Leo hasta al boleto del colectivo. Estos libros en particular son de autores clave en mi formación académica: Manuel Puig, Griselda Gambaro, Andrés Rivera, y millones más. Leo vorazmente desde que tengo conciencia. No solamente literatura, también libros políticos, ensayos. En cualquier parte de la casa siempre hay algún libro tirado. Ahora estoy leyendo un ensayo sobre la construcción del guión cinematográfico.

2. Laptop

Todo mi trabajo está en la computadora, escribo, busco material, investigo, bajo películas, robo cosas (videos, música), edito. Es una extensión de mi mano y mi cabeza. No puedo estar sin la computadora. Soy adicto a Internet. Estoy conectado todo el tiempo. Uso mucho el Facebook y veo pornografía. No chateo.

3. Películas

Casi no veo televisión y llego a ver hasta 4 o 5 películas por día. Hago maratones de películas. Y tengo más de 5000 películas, muchos DVD originales. Algunos que me mandan para los festivales, mucha película que me mandan las distribuidoras y también otras tantas que me bajo. Muchas forman parte de mi trabajo como programador, y también son herramientas para las clases de cine que dicto. Otras son de puro cinéfilo. Soy de ver filmografías completas de directores. Son como mis fetiches las de Leonardo Favio, Lucrecia Martel, Lukas Moodysson, y Tsai Ming-Liang.

4. El mate

Es mi compañero. Viví en Misiones, trabajando para un Festival de Cine por mucho tiempo. Y los misioneros se asombraban de que tomaba mate más que ellos. A veces, también tomo vino.

foto y producción Sebastián Freire

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