Jorge Guinzburg falleció hoy a los 59 años, en la Clínica Matter Dei de la Capital Federal, donde se encontraba internado desde la semana pasada a raíz de una infección pulmonar.

Guinzburg había creado años atrás el exitoso magazine matutino "Mañanas informales", cuya conducción había abandonado a fines del 2007 por prescripción médica y este año había vuelto a la conducción televisiva con una reedición de "La Biblia y el calefón", que grababa una vez por semana.

Hincha connotado y fervoroso de Vélez Sarsfield, Jorge Guinzburg se había iniciado en el periodismo gráfico en las legendarias revistas "Satiricón" y "Humor".

Asimismo, fue un reconocido publicista, ganando distintos premios internacionales como director creativo de distintas agencias.

En los inicios de la etapa democrática, Guinzburg condujo junto a Carlos Abrebaya un ácido y divertido programa periodístico matutino en Radio Belgrano: En ayunas. En esa misma época salía al aire en la emisora porteña Sin anestesia, conducido por Eduardo Aliverti y Sueños de una noche de Belgrano, encabezado por los entonces casi desconocidos Jorge Dorio y Martín Caparrós.

"Yo estaba haciendo En ayunas en Radio Belgrano, Abrevaya y yo le llevamos un proyecto a Carlos Montero, y cuando lo vio, nos dijo que Becerra y Castello le habían llevado un proyecto muy parecido, así que la única forma de que no pareciera que nos habíamos afanado, era juntarnos a los cuatro. Así nació La noticia rebelde", contó años más tarde.

"La noticia rebelde", un programa que condujo junto a Raúl Becerra, Adolfo Castelo, Carlos Abrevaya y Nicolás Repetto (entonces un simpático movilero), cambió para siempre el humor y el modo de analizar la realidad en la televisión argentina.

Posteriormente, pasó por distintos programas como la primera versión de "La Biblia y el calefón", el programa humorístico "Peor es nada", que hizo con Horacio Fontova, y "Guinzburg & Kids".

Premio Konex de Platino como Mejor Conductor de la década del 90, la incansable tarea de Guinzburg lo llevó en los últimos años a transformarse en uno de los más dinámicos productores teatrales del medio local.

También fue guionista de la tira gráfica "Diógenes y el Linyera" que, con dibujos de Tabaré, se edita hace décadas en la contratapa del matutino Clarín.

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