En una declaración difundida por la Presidencia de Venezuela, se informó que en su visita del miércoles a Caracas el canciller de Francia, Bernard Kouchner, entregó una carta del presidente Nicolás Sarkozy a Chávez en la que éste le agradece su intervención en el caso de los secuestrados por las FARC.

El texto también expresó su preocupación por el delicado estado de salud de la ex candidata presidencial colombiana Ingrid Betancourt, y le pide a Chávez que utilice "toda su influencia para encontrar una nueva iniciativa sobre la cual se pueda luego hacer propuestas a la comunidad internacional".

La declaración del gobierno venezolano señaló que Chávez reconoció que la situación en Colombia es "compleja" y que se agravó luego de la muerte del jefe guerrillero Raúl Reyes en la operación colombiana en territorio ecuatoriano a comienzos de marzo.

"Sin embargo, (Chávez) le ratificó a su homólogo francés la firme intención del gobierno venezolano de continuar trabajando en conjunto por la liberación de todos los rehenes civiles, como un primer paso hacia el canje humanitario necesario para impulsar el proceso de paz en Colombia", señaló la declaración, según la agencia DPA.

Kouchner hizo esta semana una visita a Bogotá, Quito y Caracas en busca de retomar alguna gestión a favor de un intercambio humanitario, atento al interés de Francia, sobre todo, por la suerte de la colombo-francesa Betancourt.

Desde Bogotá, en tanto, se conoció hoy que el presidente Uribe autorizó al ex ministro Alvaro Leyva y al director del semanario Voz, Carlos Lozano, a buscar un contacto con las FARC.

El ex titular de Minas y Energía y el director del semanario del Partido Comunista cuentan con plena autorización de parte del gobierno para contactar a la organización guerrillera, según informó el periódico El Espectador.

En una entrevista con una radio local, Uribe se mostró discreto sobre este tema y rehusó comentar de qué tipo son los acercamientos que intentarán Leyva y Lozano con la guerrilla.

El rotativo señala que Uribe dijo que también sigue vigente la autorización a la Iglesia Católica, para que busque una puerta que facilite la entrega de los cautivos en poder de la guerrilla.

Además, están acreditados los delegados de Francia, España y Suiza, con el mismo fin, agrega el reporte.