Se trata de Binyam Mohamed, un ciudadano etíope de 30 años, con residencia en Gran Bretaña, que enfrenta cargos de terrorismo en Estados Unidos y por eso se encuentra detenido en Guantánamo, Cuba, desde 2004. En su denuncia, Mohamed sostiene que esos documentos secretos evidencian que fue torturado para extraérsele información cuando estaba detenido.

Los jueces del Alto Tribunal británico consideraron que la información vinculada a Mohamed "no sólo es necesaria, sino esencial para su defensa", informó la agencia de noticias Ansa. Washington acusa al residente británico de conspirar con miembros líderes de Al Qaeda en el planeamiento de ataques terroristas contra civiles.

El hombre enfrenta un juicio militar en Estados Unidos y, en caso de ser hallado culpable, podría enfrentar la pena de muerte. Mohamed se trasladó a Gran Bretaña como refugiado procedente de Etiopía a la edad de 15 años y fue arrestado en Pakistán en abril de 2002.

El detenido, que vivía en el oeste de Londres, afirma haber pasado 18 meses en Marruecos, donde denunció haber sido torturado antes de ser trasladado a un campo militar manejado por la CIA en Afganistán, y de allí a la prisión en territorio cubano. Mohamed sostiene que los cargos en su contra están fundamentados en confesiones obtenidas por métodos de tortura y malos tratos.

Tras el veredicto de hoy, el abogado defensor Richard Stein declaró que la sentencia "refleja el aborrecimiento de una sociedad decente hacia los métodos empleados por el gobierno de Estados Unidos en la llamada 'guerra contra el terrorismo'". "Ahora sólo esperamos que el Ministro de Exterior británico, David Miliband, tome en cuenta este veredicto y provea de asistencia directa al equipo de defensa de Binyam".