Los venezolanos votaron hoy masivamente y con entusiasmo en las elecciones regionales, que son un nueva prueba para el proyecto socialista del presidente Hugo Chávez.

Casi 17 millones de venezolanos están convocados para la jornada, que pese a los pronósticos de lluvia las primeras horas fueron acompañabas por un sol radiante en la mayor parte del país.

Las elecciones son para escocer 23 gobernadores regionales, 328 alcaldes y más de 500 concejales y determinarán si el oficialismo mantiene la mayoría que alcanzó hace cuatro años, cuando ganó 21 de las 23 regiones.

Temprano en la mañana los votantes comenzaron a hacer filas aún antes de que se abrieran los centros electorales, con una amplia participación. Mientras pasaban las horas las filas iban creciendo pero las autoridades y candidatos mantenían sus llamados a votar.

Los centros electorales en Caracas fueron saturados por electores, muchos de los cuales madrugaron para ejercer su derecho.

La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, pidió a los electores familiarse con el voto electrónico para recortar el tiempo frente a la máquina, lo que acelerará el proceso.

"Votar es fácil y el clima es estupendo gracias a Dios. Si sabemos cuántos votos vamos a emitir y la ubicación de las preferencias las tarjetas el voto durará menos de un minuto. La participación ha sido masiva, se desenvuelve con el mismo entusiasmo de siempre", dijo en una rueda de prensa a medida mañana.

Lucena señaló que no había reporte de incidentes y hasta el momento "todo está normal y el pueblo está votando masivamente".

El oficialismo salió antes del amanecer, avisando con fuegos artificiales y la diana militar que era hora de hora de votar.

En algunas zonas de Caracas comenzó a caer una llovizna y en las filas de electores se vieron votantes con sillas plegables para la espera y con paraguas para protegerse del agua.

Las autoridades dijeron que había pronósticos de lluvia, lo que mantuvo en tensión al país, después que los torrenciales aguaceros durante la semana dejaron 14 muertos y diversos destrozos en varias regiones.

Chávez planteó las elecciones como una prueba para su liderazgo, haciendo una intensa campaña por sus candidatos.

En Maracaibo, zona de una dura confrontación política durante la campaña, el alcalde de Maracaibo y aspirante oficialista a la gobernación, Giancarlo Di Martino, hizo un llamado a superar el "fantasma de la abstención".

Di Martino hizo la declaración tras depositar su voto en un colegio electoral de la ciudad de Maracaibo, donde fue rodeado por una multitud de seguidores y periodistas.

"Uno de los fantasmas que vamos a superar hoy es el fantasma de la abstención, queremos que la gente siga votando con amor, con cariño y con respeto", dijo Di Martino.

El aspirante oficialista, quien vestía una camisa roja, color característico del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), del mandatario venezolano, destacó la tranquilidad con la que hasta el momento se ha desarrollado la jornada de votación.

Di Martino y el líder opositor Manuel Rosales, gobernador saliente y postulado a la alcaldía de Maracaibo, se han convertido en las figuras políticas de Zulia.

Uno de los primeros candidatos oficialistas en depositar su voto este domingo fue el aspirante a la alcaldía de Maracaibo, Henry Ramírez, quien calificó de "satisfactorio" el proceso democrático vivido hoy en Venezuela.

El candidato opositor por la gobernación, Pablo Pérez, votó en medio de gritos de apoyo y a la salida del centro electoral dijo que era "ejemplar" la forma en que se desarrollaba el proceso.

"Mañana quedarán atrás las rencillas, mañana nos abrazaremos todos los zulianos porque al final somos hermanos", dijo.