Richardson, de 61 años, hijo de madre española y padre nicaragüense y uno de los primeros dentro del Partido Demócrata que dio su apoyo a Obama, fue secretario de Energía y embajador ante las Naciones Unidas con el presidente Bill Clinton.

Obama dijo que Richardson es un "gran amigo" que comparte sus mismos valores y que aporta una "estatura internacional al cargo".

Richardson, por su parte, aseguró que constituye el nombramiento "un gran honor" y habló del "papel vital" que el Departamento de Comercio debe desempeñar en la recuperación de la crisis económica que afronta el país, informó la agencia de noticias DPA.

El futuro funcionario de la administración Obama, que habló también en español, se dirigió expresamente a "los millones de habitantes de América Latina y el Caribe" para decirles que "hay que fortalecer" los nexos y "recordar la importancia de un hemisferio unido".

Entre sus primeras responsabilidades, si como se espera es confirmado por el Congreso, estará decidir sobre los Tratados de Libre Comercio (TLC) con Panamá y Colombia, que fueron rubricados por la administración de George W. Bush, pero aún deben ser ratificados por el Capitolio.

Richardson sucederá en el cargo a otro latino, el cubano- estadounidense Carlos Gutiérrez, que ocupa el puesto desde febrero de 2005.

Durante las últimas semanas la comunidad hispana -un apoyo fundamental para el triunfo de Obama- presionó para que Richardson fuera nombrado secretario de Estado, cargo que fue a parar a la senadora Hillary Clinton, lo que originó protestas de algunos sectores latinos.

Ante esta inquietud, Obama intentó dar un mensaje de calma a los latinos y recordó que aún le quedan muchos nombramientos por hacer.

"He nombrado a la mitad de gabinete. Cuando la gente mire atrás y vea toda la composición, no sólo de mi gabinete, sino de todo mi equipo en la Casa Blanca, la gente va a ver que es uno de los equipos más diversos".

La prensa estadounidense destacó que la escenografía del hotel Hilton de Chicago -lugar del nombramiento- fue cuidada para resaltar la figura de Richardson y subrayó el hecho de que Obama escogiera nombrarlo en solitario para dar más realce a su cargo, a diferencia de las últimas ocasiones en que las designaciones fueron colectivas.

Obama incluso rechazó que el cargo en Comercio sea "un premio de consuelo". "El de secretario de Comercio es un trabajo bastante bueno, es un miembro de mi equipo económico clave", afirmó el presidente electo, que además descartó que Richardson fuese seleccionado por sus raíces: "Es la mejor persona para ese trabajo", precisó.