Los detalles fueron informados este mediodía por el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández; la ministra de la Producción, Débora Giorgi, y el titular de la Oficina Nacional de Control del Comercio Agropecuario (ONCCA), Emilio Eyras, durante una conferencia de prensa realizada en Casa Rosada.

Sobre las exportaciones de carne, Giorgi ratificó que a partir de mañana el "encaje" exigido para las ventas al exterior pasarán del 65 al 30 por ciento y quedarán excluidos del depósito obligado en bodega los siete cortes de mayor calidad y que los más demandados por el resto del mundo.

"Es un aliciente muy importante, los cortes caros están totalmente liberados (para la exportación) y de paso garantizamos la provisión de los 13 cortes populares" para el mercado argentino, destacó Giorgi.

Para el caso de la leche, las solicitudes para el Registro de Operaciones de Exportación (ROE) ya no deberán ingresar por la Secretaría de Comercio Interior, manejado por el polémico Guillermo Moreno, sino a través de la ONCCA, y el permiso se dará en el plazo de cinco días de no mediar observaciones.

Los exportadores del sector lácteo deberán asegurar un stock de 25.000 toneladas de leche polvo entera o descremada, para garantizar el abastecimiento del mercado interno, explicó el titular de la ONCCA.

El jefe de Gabinete, por su parte, aseguró que "se avanzará la próxima semana" en la instrumentación de la liberación de las exportaciones de trigo y maíz y anunció que se convocará a las partes para firmar un acuerdo entre exportadores, productores y Gobierno para garantizar el consumo interno.

"Los ministros de Economía y de Producción recibieron la semana pasada sendas cartas de Cámara de Exportadores que nos garantizaban la existencia de 1 millón de tonelada de trigo y de 1,5 millón de tonelada de maíz", subrayó Fernández.

Cuando se le preguntó al jefe de Gabinete si todos estos anuncios fueron consensuados con los integrantes de la Mesa de Enlace, el funcionario sostuvo que "seguramente todo lo que se diga nunca va a alcanzar, es casi una política esa, con lo cuál uno conoce ese tema".

Y es que los dirigentes agropecuarios ya habían criticado por "unilaterales" los últimos anuncios del Gobierno para el campo, como el caso de la liberalización de las exportaciones que hoy se reglamentaron- y los subsidios para los tamberos.

Fernández reconoció que las medidas "no fueron consensuadas", pero recalcó que antes de que se adoptaran "fueron objeto de pedidos públicos y en privado a la ministra de la Producción".

"Se recogieron esos pedidos que hizo la Mesa de Enlace, se estudiaron y los que se pudieron acceder se pusieron en la práctica", aseveró.