La Presidenta explicó que el proyecto sobre el delito de calumnias e injurias surgió "del caso Kimel", en un acto de homenaje a los miembros de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH), que se realizó en el Espacio de la Memoria, que funciona en la Esma.

La CIDH falló en mayo de 2008 a favor del periodista argentino Eduardo Kimel, en la apelación que presentó éste contra el Estado, a raíz de que en 1995 fuera condenado por la Justicia a un año de prisión en suspenso y al pago de una indemnización de 20 mil pesos, culpable de los cargos de "calumnias e injurias" contra un juez, a quien mencionó en su libro "La masacre de San Patricio".

Fernández de Kirchner hizo el anuncio por la cadena nacional de radio y televisión. Casi al mismo tiempo, el jefe del bloque la UCR, Oscar Aguad, ratificó en el Congreso el compromiso opositor para revisar, después del 10 de diciembre, no solo la ley de medios que intenta sancionar el Gobierno sino también promover el tratamiento de la ley de Acceso a la Información, una norma para regular la publicidad oficial.

La Presidenta prometió defender "la libertad para poder decir lo que uno quiera y piense, aun cuando sea mentira". "Desafío a cualquier archivo, a cualquier memoria, a cualquier prueba, que no ha habido mayor libertad para hablar de las autoridades del país que en el gobierno de la primera presidenta mujer de la República Argentina", agregó.