De visita en Buenos Aires, donde fue recibido ayer por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y mantuvo reuniones en diversos ámbitos, Frei no descartó una alianza con el ascendente Marco Enríquez-Ominami en un ballotage, tras las elecciones del 13 de diciembre, aunque aclaró que ello "se analizará en su momento".

El candidato oficialista y ex mandatario de su país (1994-2000) ofreció este mediodía una rueda de prensa en la que anticipó su negativa a cualquier ley de amnistía para ex represores y postuló una reforma en el sistema electoral actual -creado por el pinochetismo- que excluye a partidos chicos.

También reclamó que la Justicia encuentre a los responsables del crimen de su padre, el tambien ex presidente Eduardo Frei-Montalva.

Respecto de la aparición sorpresiva de Enríquez-Ominami, un diputado de 36 años que se escindió de la gobernante Concertación y viene creciendo en intención de voto en todas las encuestas, dijo que "es bienvenido un aporte a la campaña si sirve para discutir ideas y enriquecer el debate".

Acerca de si Enríquez-Ominami le resta votos, concluyó que "puede ser, pero la presidenta Michelle Bachelet fue absolutamente clara en afirmar que el candidato de la Concertación soy yo".

Bachelet mantiene una imagen positiva de alrededor de 70 por ciento, y sin embargo la candidatura de Frei no logra hasta el momento cautivar a más de 30 por ciento, por debajo de las preferencias hacia Piñera (37 por ciento) y por sobre el ascendente Enríquez (20 por ciento).

Respecto de Piñera, señaló que le preocupa que se trata del "dueño de un canal de televisión", lo que a su juicio le da armas para balancear a su favor la campaña mediática.

"También creo que de llegar al gobierno, Piñera dejará fuera de servicio a los medios de comunicación pública, cosa que nosotros rechazamos de plano".

En esa línea, aseveró que la Concertación se opone a las políticas privatistas que excluyen el rol del Estado. "En todo el mundo fracasó la política privatista, y esto quedó ampliamente demostrado con la última crisis internacional: los países con estados más fuertes enfrentaron mejor la crisis", enfatizó.

Evitó dar a conocer su opinión acerca de temas como las legalizaciones del aborto y del consumo de algunas drogas, respondiendo que "hablar de estas cosas no es ser progresista. Ser progresista es impulsar reformas laborales, electorales, profundizar las medidas en el campo de la salud y la educación. Eso es el progresismo".

Acerca de la muerte de su padre Frei-Montalva, ocurrida el 22 "de enero de 1982 luego de una intervención quirúrgica, y de la cual investigaciones recientes señalaron que pudo haber sido envenenado, Frei dijo que tiene la "convicción" de que así fue, y que aguarda que la Justicia "logre dar con los responsables y los castigue por esa acción criminal".

En otro orden, descartó que la reciente sanción de la Ley del cobre pueda originar algún conflicto con las Fuerzas Armadas, dado que incluye cambios en el sistema de financiamiento de esos organismos militares, y aclaró que todas las instituciones castrenses "no influyen para nada en la política del país".