"Gianpaolo fue detenido por tráfico de droga, pero también por riesgo de fuga y porque habría podido manipular las pruebas en su contra", declaró Antonio Laudati, fiscal de Bari,quien investiga a los hermanos Tarantini, acusados de corrupción y deslealtad comercial.

Las escuchas telefónicas realizadas en el marco de la investigación levantaron sospechas de tráfico de droga y de "incitación a la prostitución", ya que Gianpaolo Tarantini fue quien habría contratado a distintas mujeres para pasar la noche en dos de las residencias del jefe de Gobierno, en Roma y en Cerdeña.

Berlusconi nunca ha negado la celebración de tales fiestas, si bien ha afirmado que no sabía que las jóvenes cobraban por asistir a ellas.