Levy se dedica a la fabricación de cremas de enjuague y dentales, que exporta a la nación del norte del Cono Sur a partir de la crisis en las relaciones diplomáticas y comerciales que sufrieron venezolanos y colombianos.

Ante la consulta de si algún funcionario argentino o venezolano le había insinuado la posibilidad de un pago extra a cambio de la concreción del negocio, Levy respondió que "en lo más mínimo. Mis pasos fueron transparentes. No se nos acercó nadie a pedir nada ni de Venezuela ni de la Argentina".

El empresario agregó, en una entrevista con la agencia Télam, que "si hay alguien que dice que hubo coimas, lo deberá probar. Hay un fin político en estas denuncias", interpretó.

Levy aseguró que "hasta el momento, los venezolanos han cumplido en el cien por ciento los términos de lo acordado y nosotros hicimos lo propio en los plazos de entrega". Según el empresario, "lo que nosotros conocíamos del mercado venezolano era que solían pagar en plazos muy extendidos, pero ahora lo que hicieron fue crear un fondo específico que le dio velocidad a la cancelación de las compras al exterior".

"El comercio con Venezuela lo hicimos nosotros personalmente y lo logramos a través de la Cancillería argentina. Ellos enviaron un mail al sector y se concretaron las primeras reuniones con los venezolanos", explicó Levy.

El empresario añadió que "la negociación llevó tres o cuatro meses con los venezolanos, mientras que nuestra primera venta se concretó hacia fin del año pasado".