El fotógrafo muerto, Luis Carlos Santiago Orozco, de 21 años, realizaba prácticas en "El Diario" y estaba a punto de ser contratado de manera efectiva en el periódico. El ataque ocurrió en el estacionamiento de un centro comercial cuando acudió a comer con otro colega, quien resultó herido, después de asistir a un curso de capacitación. Según el vocero Poiré, de acuerdo con las primeras investigaciones de la Procuraduría del estado de Chihuahua, el ataque estaría motivado por razones "de índole personal y no por sus actividades profesionales".

El domingo, "El Diario" publicó en primera plana el editorial que ahora cuestiona el gobierno federal, en la cual afirmaba que "como trabajadores de la información queremos que nos expliquen qué es lo que quieren de nosotros, qué es lo que pretenden que publiquemos o dejemos de publicar, para saber a qué atenernos". "Ustedes -agregaba el texto- son, en estos momentos, las autoridades de facto en esta ciudad, porque los mandos instituidos legalmente no han podido hacer nada".

El periódico, por su parte, que en 2008 sufrió el asesinato del periodista Armando Rodríguez y ahora del fotógrafo Luis Carlos Santiago Orozco, afirmó que "ésta no es una rendición" sino un pedido de "tregua para con quienes han impuesto la fuerza de su ley en esta ciudad". El subdirector de "El Diario", Pedro Torres, sostuvo en una entrevista radial que el objetivo del editorial fue no sólo apelar al crimen organizado, sino también hacer un llamado de atención a las autoridades. "Esta columna está dirigida a todos. Abiertamente está dirigida a los grupos en pugna", indicó, pero de igual forma "tiene que hacer sonar las campanas en algunas conciencias". Según aseguró, la decisión de pedir una tregua "no es claudicar totalmente", ya que el diario seguirá informando, aunque con más precauciones.

"Vamos a pedirle a nuestra gente que se cuide más, que sea más precavida, que a lo mejor no llegue tan lejos en la información", indicó. "Necesitamos también asegurarnos de que no nos vuelva a ocurrir esto. Creo que dos muertes ya es pagar suficiente".

Desde hace varios años, organizaciones de prensa han alertado sobre los riesgos de ejercer el periodismo en México y la "autocensura" que están aplicando los medios. Este año han sido asesinados 11 periodistas mexicanos, según cifras de la organización "Reporteros sin Fronteras". Este miércoles una comisión conjunta de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), con sede en Nueva York, se reunirán en Ciudad de México con el presidente Felipe Calderón para hablar de la "grave crisis en la libertad de prensa" que existe en México.