Por mayoría, la Sala III del tribunal se opuso al pedido formulado semanas atrás por el defensor de Palacios, el abogado Diego Richards. Los camaristas Gustavo Mitchell y Angela Ledesma firmaron el voto que desestimó el recurso, en tanto Liliana Catucci se pronunció a favor de la libertad del procesado.

El tribunal ya le había negado a otras dos ocasiones la libertad a Palacios: en marzo de este año, cuando rechazó un pedido de excarcelación, y en agosto último al confirmar la prisión dictada en primera instancia por el juez federal Norberto Oyarbide.

Los argumentos para volver a negar el beneficio son similares a los anteriores: los supuestos "contactos" de Palacios y el riesgo que, en libertad, pueda entorpecer el avance de la pesquisa en la que también están procesados, entre otros, el jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri y al ex policía federal Ciro James.

La mayoría recordó que cuando Oyarbide procesó a Macri y a James consideró probada su responsabilidad penal en la "escucha" a Néstor Leonardo, cuñado del jefe de gobierno y no descartó la posible participación de Palacios en ese hecho. Mitchell y Ledesma evaluaron que se encuentra en trámite un exhorto a los Estados Unidos relacionado para determinar el rol que habría tenido la empresa Ackerman Group en la intervención de la que habría sido víctima Leonardo. En su recurso ante al Cámara de Casación, Richards había señalado que por ese hecho Palacios no se encuentra procesado.

Catucci, quien votó a favor de la libertad de Palacios, sostuvo que "la enunciación de pruebas de incierto resultado no son contundentes" para oponerse a la excarcelación. Con relación a los "riesgos de elusión de la justicia o entorpecimiento de la investigación" por parte de Palacios, la camarista recordó que el ex jefe de la Policía Metropolitana "estuvo a derecho" y se presentó ante la justicia cuando fue citado por Oyarbide. El voto disidente coincidió con la defensa sobre el acceso público al sistema y base de datos NOSIS, utilizado como elemento de cargo contra Palacios.

El ex jefe de la Policía Metropolitana fue procesado con prisión preventiva el 2 de diciembre de 2009 por supuesto espionaje telefónico a un familiar de víctimas del atentado a la AMIA, Sergio Burstein, un crítico de Palacios y Macri. Palacios habría sido el ideólogo de la maniobra, ejecutada por James, calificada como "intervención indebida de comunicaciones y adulteración de documento público".