"En Ecuador no se necesita una reforma agraria, se necesita una verdadera revolución agraria", dijo Correa, citado por el diario estatal El Telégrafo, y se comprometió a iniciar ese proceso para "inaugurar la justicia en los campos ecuatorianos".

El mandatario presentó "de todo corazón disculpas" a "los hermanos y hermanas campesinos de Ecuador" porque su gobierno "ha hecho todo lo posible", pero reconoció que "aún les falta mucho" para profundizar la reforma agraria.

Asimismo, afirmó que después del intento de golpe de Estado del pasado 30 de septiembre, se reunió con sus ministros con los que llegaron a la conclusión "de radicalizar la revolución ciudadana".

Añadió que "parte de esa radicalización es radicalizar las reformas agrarias en función de los más pequeños, de los más pobres".

En su discurso, el presidente tuvo un especial recuerdo para el estudiante Juan Pablo Bolaños, quien murió durante los disturbios policiales del pasado 30 de septiembre, tras acudir al Hospital policial de Quito, donde Correa estaba secuestrado por los agentes sublevados.

"La pérdida de una vida tan valiosa en la flor de la juventud, me parte el alma, pero también nos compromete a seguir luchando más que nunca", dijo el mandatario.

Por su parte, el presidente boliviano y fundador del CLOC, Evo Morales, afirmó que Estados Unidos está detrás de la sublevación policial del 30 de septiembre en Ecuador. "Al analizar de donde viene este golpe, este golpe de Estado viene de Estados Unidos, del imperialismo, del capitalismo", dijo Morales anoche al inaugurar el congreso de la CLOC.